El economista jefe de Itaú sería el nuevo presidente del Banco Central de Brasil

El presidente interino de Brasil, Michel Temer, comenzó rápidamente a delinear un plan de estabilización económica a través de un equipo con fuerte aceptación en el mercado, que ya está siendo liderado por el ministro de Hacienda, Henrique Meirelles.
El ex-presidente del Banco Central de Brasil (BCB) durante el gobierno de Lula Da Silva, probablemente elija al economista jefe de Itaú Unibanco, Ilan Goldfajn, como jefe de la entidad monetaria, en un intento por recuperar la confianza de los inversores, dijo ayer a la agencia Reuters un funcionario familiarizado con las discusiones.
Meirelles retrasó el anuncio de su equipo económico hasta mañana para darle a los especialistas designados el tiempo suficiente para dejar sus empleos en el sector privado, aseguró el funcionario que pidió el anonimato.
Pese a que la designación de Goldfajn es hace tiempo un secreto a voces, desde la oficina de prensa de Meirelles se negaron a hacer comentarios de si el economista jefe de Itaú era el elegido para tomar las riendas de la entidad monetaria que presidió Alexandre Tombini desde enero de 2011.
Sin embargo, es posible que Goldfajn comience sus funciones en el BCB antes de la próxima reunión de política monetaria de la entidad, que tomará lugar el 8 de junio.
En una columna de opinión en el diario local OGlobo publicada el 5 de abril, Goldfajn advirtió contra un precipitado recorte de las tasas de interés, pero reconoció que una desaceleración de la inflación permitirá al BCB comenzar a relajar la política monetaria más adelante en el año.
Bajo el liderazgo de Tombini, el organismo emisor no ha cumplido reiteradamente con sus objetivos anuales de inflación, dañando las credenciales del banco en su lucha contra el alza de los precios y alimentando la especulación de una interferencia política. Si bien la recesión económica y las altas tasas de interés permitieron al BCB encauzar la inflación hacia la baja.
Luego de que Dilma Rousseff fuera suspendida por el Senado para enfrentar un juicio político por violar leyes presupuestarias, Temer encomendó a Meirelles revivir la economía atrapada en una de las peores recesiones de su historia. La clave está puesta en una agenda de reforma fiscal.
El gobierno de Temer proyecta un déficit presupuestario primario para este año de más de 120.000 millones de reales, unos u$s 34.270 millones, muy por encima de los 97.000 millones de reales estimados por la anterior administración, dijeron a Reuters tres funcionarios con conocimiento del tema.
Temer planea presentar esta semana un proyecto para cambiar la estimación del déficit primario, que es la brecha presupuestaria antes del pago de intereses, aseguró ayer el ministro de Planificación Romero Juca.
En otro cambio de liderazgo importante, la nueva administración designó a María Silvia Bastos, ex presidenta ejecutiva de la siderúrgica CSN, como jefa del banco de desarrollo estatal BNDES, dijo ayer a la prensa la oficina de Temer.