Dólar: el BCRA se plantó en la oferta y marcó el rumbo bajista sin vender un billete

Los inversores tomaron la estrategia con cautela, vendrían precios más baratos. De hecho, así fue: la cotización mayorista perdió terreno sin que la entidad entregara un solo dólar. El billete se mantuvo sin cambios. 

El mercado de cambios estuvo parado durante la primera hora y media debido a que, en el arranque, el Banco Central (BCRA) se ubicó del lado vendedor con una ficha de u$s 50 millones en $ 59,99. El mensaje era claro: de ahí el precio no iba a pasar. 

Así fue cómo el primer negocio del dólar se fijó a la baja, una tendencia que se mantuvo durante toda la rueda. El Central dijo presente, marcó la cancha, pero sin vender un solo dólar.

Los inversores que pueden comprar, aquellos que tienen autorización en pleno cepo, operaron con cautela. 

El dólar mayorista quedó en el cierre a $ 59,925, por debajo del valor del lunes de $ 59,97, y casi en el mínimo del día, de $ 59,91.

Cabe señalar que, en los precios más bajos, aparecieron compras del Banco Nación, operaciones que sumaron unos u$s 50 millones y que en la City "le anotaron" al BCRA.   

 

 

El billete, en tanto, se mantuvo sin cambios en las pantallas del BCRA, a $ 62,25 para la venta. El precio promedio del dólar minorista registró una caída de tres centavos sobre el final: terminó en $ 62,90. 

Por su parte, el dólar blue deambuló por ambos terrenos; abrió al mismo precios que ayer, se fue a la baja y luego subió a $ 68,50, por lo que encaraba el cierre 25 centavos más caro que en la víspera.

En cuanto al contado con liqui, abandonó los avances iniciales y se inclinó a la baja: se operaba a $ 74,69, un 0,6% negativo. 

Desde el lunes el Central mostró un cambio de estrategia: pasó de comprar a vender. Sin embargo, no fue una elección; a diferencia de las ruedas de semanas atrás, el dólar se recalentó, por lo que era momento de actuar.

La intención oficial es que el precio mayorista no quiebre la barrera psicológica de los $ 60, por eso se planta del lado de la oferta con una ficha que, aunque es chica, alcanza para dirigir un mercado muy reducido.

El volumen de negocios apenas rondó los u$s 210 millones. 

Con ayuda del cepo recargado y de las manos amigas, es decir, de la banca púbica, el BCRA llevaba comprados más de u$s 2000 millones de las elecciones presidenciales, pero luego debió despresenderse de parte de esos dólares para contener el precio, aunque en este caso, la intervención la hizo de forma directa, sin intermediarios. 

Y si se confirma que las compras del Nación fueron por orden del Central, la entidad monetaria habría recuperado los u$s 50 millones vendidos ayer, ya que hoy no entregó ninguna divisa.  

Por otra parte, las subastas de Leliq dejaron a la tasa de referencia, la tasa promedio, en 63%. El monto total adjudicado entre las dos licitaciones fue de $ 190.468 millones, lo que significó una contracción de $ 22.885 millones.

Frente a la región, el comportamiento del peso no desentonó, ya que las monedas latinoamericanas apenas se movieron contra el dólar. Las excepciones fueron, por un lado el peso chileno, que cedía 0,16%, y por el otro, el real brasileño, que se apreciaba un 0,43%. Ambos países tienen motivos para mostrar reacciones más bruscas: sus monedas vienen de sufrir mayor volatilidad y se reacomodan. 

 

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