El mercado local muestra señales de reactivación de corto plazo, con las acciones rebotando en el último mes hasta un 21%. Los bonos también suben, aunque con una dinámica más lenta.
De cara al tarde electoral, el mercado ve potencial alcista en los activos de riesgo local, aunque señalan el mayor atractivo en la renta variable argentina. Cuáles son los nombres que recomiendan los analistas.
Buscando un piso
Las acciones y los bonos se han recuperado en las últimas semanas.
Las acciones de Telecom lideran las subas entre los papeles argentinos en Wall Street, con avances del 21%, seguida por Edenor, que gana 17,8% en el último mes.
Le siguen TGS, IRSA, BBVA Argentina, Central Puerto, Banco Macro, Grupo financiero Galicia, Grupo Supervielle e YPF, con avances de entre 10% y 16% en el último mes.
Otros papeles como Corporación América, Loma Negra, Cresud y Pampa también muestran ganancias en el último mes, de entre 7% y 9%.

Con una tendencia similar, aunque con una dinámica más lenta, la renta fija argentina en dólares también se ha recuperado.
El Global 2029 sube 2,9% en el último mes, mientras que el GD30 avanza 3,2%.
Los títulos del tramo medio evidenciaron avances en el último mes de 3,2% y 3,1% en los Globales a 2035 y 2038 respectivamente.
Finalmente, los bonos que vencen en 2041 y 2046 mostraron subas a lo largo del último mes de 2,9% y 2,8% respectivamente.

El mercado parecería volver a recuperar la tendencia alcista de corto plazo, aunque queda en evidencia que las acciones quedaron en niveles lejanos respecto de las acciones.
En el ajuste previo al rebote actual, las acciones habían mostrado una caída mucho mayor respecto de la renta fija argentina, haciendo que la cercanía entre una clase de activos y otra se distancie.
Hasta abril, la dinámica entre bonos y acciones era muy similar, sin embargo, desde el fin del cepo, las acciones se distanciaron de los bonos.
Ahora, las acciones parecen recuperar terreno más rápido que los bonos.
Particularmente desde fines de mayo y hasta la tercera semana de julio el Merval medido en dólares se contrajo 22%, mientras que los bonos en dólares tuvieron una caída promedio de 2%.
Desde el 22 de julio hasta ahora, las acciones argentinas vienen mostrando una suba en dólares cercana al 10%, mientras que los bonos en dólares escalaron 3%.

Dada la distancia que aún se mantiene entre los bonos y las acciones, los analistas buscan oportunidades en el mercado local aunque señalan que, producto del mayor sufrimiento en la renta variable local, hoy los papeles de las compañías argentinas tienen mayor potencial.
De cara al inicio del trade electoral, el mercado se inclina mayormente a la renta variable, señalando que en los papeles locales podrían tener una mejor dinámica alcista que la deuda argentina.
Matías Waitzel, socio de AT Inversiones, resaltó que en las últimas ruedas vimos un rebote tanto en bonos como en acciones, aunque la renta variable llegó más castigada y, por lo tanto, con un mayor recorrido potencial.
A la hora de seleccionar entre bonos y acciones, Waitzel indicó que para un perfil arriesgado, hoy se inclina por las acciones.
"Los precios siguen reflejando un castigo excesivo y, con el ruido político parcialmente despejado post elecciones si le va bien al oficialismo y valuaciones atractivas, hay espacio para una recuperación que las acerque al máximo alcanzado en enero de este año", sostuvo.
Dentro del mundo accionario, desde AT Inversiones favorecen al sector bancario por su beta alta y la posibilidad de una expansión significativa del crédito en 2026.
También ven valor en el sector de Oil & Gas, que combina fundamentos sólidos con catalizadores de mediano plazo.
"Los nombres que nos gustan son acciones de Banco Galicia, Banco Macro, YPF, Pampa Energía y Vista Oil & Gas mantienen un perfil atractivo para capitalizar un escenario de compresión de riesgo y normalización de expectativas", afirmó Waitzel.
Por su parte, Nicolás Kohn, Head Wealth Management Research en Balanz, consideró que la dinámica de los activos financieros locales hacia adelante va a depender del escenario electoral que se trace.
En esa línea, y pensando que indicadores como el de confianza en el gobierno se encuentra en un nivel al cual en elecciones pasadas a los oficialismos les fue muy bien en las elecciones de medio término, las acciones podrían tener más recorrido de corto plazo que los bonos.
"Si bien en un escenario electoral favorable para el gobierno el diferencial de tasas de interés debería comprimir y empujar a los retornos de los bonos, las acciones vienen mucho más rezagadas este año, principalmente aquellas que tienen una mayor sensibilidad al riesgo país. Para un perfil agresivo, las acciones lucen más atractivas que los bonos", comentó Kohn.
Las acciones más lejos de los máximos
Respecto de los máximos de comienzo de año, los bonos del tramo corto se ubican entre 2,5% y 3% por encima de dichos valores.
Sin embargo, los bonos del tramo medio y largo todavía se encuentran entre 0,9% y 4,5% debajo de los máximos alcanzados en enero.

Tomando desde la misma fecha, las acciones acumulan perdidas mucho mayores.
Salvo IRSA que se ubica un 4% por encima de los picos de enero, todos los demás papeles muestran fuertes bajas.
El sector financiero es el más golpeado, con mermas de 41% en Grupo Supervielle, mientras que las acciones de Galicia, BBA Argentina y Banco Macro muestran descensos de entre 27% y 35% desde los máximos.
Otros papeles como YPF, Vista, Loma Telecom, Pampa y Edenor, operan con caídas de entre 20% y 26% desde los máximos de enero.
De esta manera, los analistas reconocen que existe mayor potencial de suba en las acciones ya que son justamente estas las que más lejos de los máximos están, y que pueden llegar a tener una mejor dinámica alcista ante un resultado electoral favorable para el Gobierno.
Pablo Lazzati, CEO de Insider Finance, también se inclina por las acciones antes que los bonos.
"Vemos atractivas las acciones locales porque están bastante retrasadas en comparación con los bonos y entendemos que ya están en niveles en los que tenderían a subir y equipararse. Para un perfil arriesgado preferimos la combinación de bonos y acciones, en donde un 60% sea de en las acciones previamente mencionada y el 40% restante en bonos locales", comentó.
En relación a los papeles a incorporar en las carteras, Lazzati agregó a YPF, TGS y Pampa dentro del sector energético, manteniéndose en espera en el sector bancario y sumando acciones como BYMA y Molinos Agro para diversificar el portafolio. En lo que respecta a los bonos, Lazzati se inclina por el tramo medio y largo como el AL35, AL41 y GD46.

Por su parte, Lisandro Meroi, Research Analyst de TSA Bursátil, sostuvo que, de cara a las elecciones que tendrán lugar en septiembre y octubre, ambas clases de activos pueden tener un rally en caso de concretarse buenas cifras para el oficialismo.
"Ponderamos en cartera soberanos como GD35 y GD41, con potencial de suba entre +16% y +17% en simulaciones de convergencia a curva de calificación crediticia B para fin de año, con retorno positivo y superior al resto de los títulos incluso en caso de equipararse con créditos CCC", dijo.
A su vez, también agregó que existe potencial alcista en las acciones.
"Con un Merval medido en dólares -19% abajo en lo que va del año, la incorporación de equity aparece como un complemento, quedando la proporción en el portfolio sujeta al riesgo que desee asumir el inversor", comentó.
Riesgo país y acciones
El precio de las acciones dependen de forma indirecta del riesgo país ya que para calcular el valor actual de las compañías argentinas se necesita una tasa de interés que surge del riesgo país.
El valor actual de las acciones es el flujo de fondos futuros de la compañía descontados a valor actual. Para traer dichos flujos a valor actual se utiliza una tasa de interés, la cual surge del riesgo país.
Cuanto más baja la tasa, mayor es el flujo de fondos futuros traídos a valor actual, y por lo tanto, mayor podría ser el valor de la acción.
Por ello, las acciones necesitan de un menor riesgo país para seguir subiendo.
Actualmente, con el riesgo país en niveles de 700 puntos y el S&P Merval en u$s 1700, todavía podría haber potencial alcista mayor en el índice accionario local.
En el pasado, a igual valor del riesgo país, el S&P Merval supo estar incluso en valores por encima de los u$s 2300.

Damián Vlassich, Team Leader de Estrategias de Inversión en IOL, remarcó que dado el actual nivel del riesgo país, el S&P Merval en dólares supo mostrar subas adicionales y alcanzar valores más altos.
"Vemos posible un nuevo rally del mercado local. El mismo tendría una probabilidad de ocurrencia mayor ante un escenario constructivo como país. Los balances del segundo trimestre de 2025 no están siendo especialmente buenos, con la excepción del sector de regulados. Y esto último consideramos que no es una problemática menor, ya que se limitan los catalizadores que pueden dar impulso", detalló.
Bajo este panorama, Vlassich considera clave diversificar portafolios en acciones.
"Más allá del diferencial de rendimiento entre bonos y renta variable, aconsejamos posicionarse en acciones locales especialmente para perfiles más agresivos, siendo importante la diversificación y buscando sobre ponderar aquellos sectores con fundamentales más sólidos y potencial de crecimiento, como servicios y oil & gas, por ejemplo", indicó.
Matías Cattaruzzi, sr. equity research de Adcap Grupo Financiero, detalló que ve valor en el sector de oil & gas, aunque con selectividad.
En ese contexto, ve potencial en acciones de YPF, con un precio objetivo de u$s 50, es decir, 40% de suba desde los valores actuales. Para Pampa Energía (PAM), tiene un precio objetivo de u$s 107, es decir, una suba del 38%. Finalmente, también recomienda mantener una exposición a TGS, y Transener.



