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Finalmente, este lunes, a tan solo cinco ruedas de las elecciones legislativas, el Banco Central (BCRA) anunció la suscripción del famoso "swap" con EE.UU. del que tanto se habló en el último tiempo. Lo más relevante es que permite usar los fondos para intervenir en el dólar, aunque no se contabiliza directamente en las reservas, si no que impactará a medida que se activen los distintos tramos.
"Se continúa mejorando la liquidez del BCRA y los instrumentos de política monetaria y cambiaria para contribuir a la estabilidad macroeconómica y la baja de la inflación", dijo en la red social X el director del regulador monetario Federico Furiase ante este anuncio.
Para el regulador, lo relevante es que los dos permiten al BCRA ampliar las herramientas que tiene para la implementación de la política monetaria y cambiaria. Pero lo más importante es el significado político. Y así lo lee el mercado también.
"Esto no tiene precedentes dentro de Estados Unidos. Se explica por la personalidad de Trump y su buena sintonía con Milei. Puede también ser algo más, en términos de áreas de influencia globales y competencia geopolítica o comercial con China", evalúa Daniel Marx, director de Quantum.
Y considera que "la señal que envía EE.UU. tiene que ver con un apoyo político a las políticas muy explícito y con eso también se supone que reforzar algunos aspectos que haya que reforzar para llegar a una mayor estabilización cambiaria".
Dólares para intervenir
"El punto más relevante del comunicado del BCRA es que el swap podrá utilizarse con fines de intervención cambiaria, lo que -de confirmarse en la práctica- ampliaría el margen operativo para administrar la volatilidad en los dólares financieros y el tipo de cambio oficial", destaca un rápido análisis inicial de la consultora CEPEC.
"Está claro que la finalidad primaria es aguantar el tipo de cambio hasta las elecciones del domingo", indica Héctor Giuliano, Licenciado en Administración y Finanzas y experto en Deuda Pública y Externa, a este medio. En definitiva, es una manera de apuntalar el poder de fuego del Central ante situaciones de fuerte volatilidad financiera y cambiaria. Se trata de un acuerdo de estabilización cambiaria con el Departamento del Tesoro estadounidense.
Sin embargo, hay algunos puntos que generan algo de escepticismo en el mercado. "Un swap anunciado solamente por una parte (la que necesita los fondos), que no impacta en las reservas parece algo inexplicable", apunta el analista de mercados Christian Buteler.
Impacto en reservas y comparación con China
Y es que, desde BCRA explicaron que, a diferencia del swap con China, éste no se refleja en la contabilización de las reservas de manera inmediata porque se trata de "operaciones que difieren en algunos aspectos técnicos y por eso tienen una contabilización diferente".
En la misma línea Marx sostiene que "los detalles importan", por lo que es bueno conocer la letra chica del acuerdo y arriesga que "parece que coexistirían los dos swaps (el chino y el estadounidense)".
"El impacto en las reservas internacionales se produce una vez que se active cada tramo del swap", aclararon y adelantaron que los desembolsos de cada tramo se irán determinando según las necesidades que tengan en el futuro.
"El impacto en las reservas internacionales se produce una vez que se active cada tramo del swap", aclararon desde el BCRA.
Otras voces coinciden en advertir que aún no se conocen los detalles técnicos del acuerdo: la tasa de interés, los costos asociados y los condicionamientos de uso. "Estos aspectos serán determinantes para evaluar la verdadera capacidad de intervención del BCRA", apuntan desde CEPEC.
"Desconocemos las condiciones. Lo único que sabemos es lo que informó el BCRA, que formaliza el apoyo del Tesoro de EE.UU., pero no sabemos bien las características", dice Giuliano.
Un mensaje al mercado
Lo cierto es que éste era un anuncio muy esperado y se sabía que iba a llegar, incluso se conocía el monto, pero el hecho de que BCRA lo haya cerrado este lunes es clave para el Gobierno, ya que inició la etapa más crítica para los mercados previo a una elección en un contexto en que el Tesoro local ya no tiene dólares para intervenir.
"Si bien ya se había anunciado, esto es más que simbólico, ya que se concreta el acuerdo previo a las elecciones y se disipan las dudas de que era condicional a su resultado", analiza al respecto el equipo de Research de Puente.
Le sirve para demostrar que Milei cuenta con el apoyo de EE.UU. incluso sin un resultado electoral en la mano tras las dudas que sembró el presidente de ese país, Donald Trump, la semana pasada cuando dijo que, si Milei perdía las elecciones no iba a ser tan generoso con Argentina.
¿Alcanza para calmar al dólar?
Sin embargo, hay quienes creen que no será suficiente para calmar la presión cambiaria en estos cinco días que quedan hasta las elecciones.
"El swap por u$s 20.000 millones otorga capacidad operativa para intervenir, refuerza la posición de liquidez y envía una señal política fuerte en un momento crítico", reconoce Leo Anzalone, director de CEPEC. Pero, en general, los análisis en la City coinciden en que esto no es suficiente para calmar las presiones cambiarias.
En Puente anticipan que esperan que la presión sobre el tipo de cambio se mantenga durante toda la semana. "La demanda por cobertura cambiaria persistirá a cualquier tipo de cambio dentro de la banda y cualquier nivel de tasas de interés hasta las elecciones", vaticinan.

Anzalone coincide en que "esto no altera la dinámica estructural del mercado de cambios, ni garantiza una estabilidad duradera" y señala que esto se debe a que, "más allá de lo que ocurra esta semana, el mercado sostiene que el esquema cambiario actual está agotado".
Cabe recordar que "este acuerdo forma parte de una estrategia integral que refuerza la política monetaria de la Argentina y fortalece la capacidad del Banco Central para responder ante condiciones que puedan derivar en episodios de volatilidad en los mercados cambiario y de capitales", resaltó el BCRA.
El foco puesto en las elecciones
Y, en ese sentido, para Anzalone, lo importante es que el BCRA gana tiempo y herramientas, pero apunta que "la sostenibilidad dependerá de lo que ocurra después del 26 de octubre, cuando la política vuelva a marcar el ritmo de la economía".
Por otra parte, considera que "las señales son contradictorias" por parte de EE.UU. porque, por un lado, Trump dice que Argentina se está muriendo, pero, por otro, Bessent da este salvavidas.




