Con un mejor humor en los mercados internacionales, el S&P Merval cerró en positivo y ganó 1,7% en torno a las 51.195 unidades. Pero los bonos volvieron a caer y el riesgo país subió hasta 1417 unidades.

En el segmento de renta variable, casi todos los papeles terminaron con subas, entre las que se destacaron las del sector de los materiales, con Aluar, que avanzó 5,7%; y Ternium, que saltó 5,1%. En la vereda opuesta, el sector financiero encabezó las mayores bajas, con el Grupo Financiero de Valores que registró una caída de 1,6%

"Hasta el momento no se percibe un driver consistente que pueda impulsar un aumento generalizado de las acciones locales", dijo el analista Javier Rava, quien agregó: "La atención continuará puesta en las negociaciones con el FMI debido a que se retomaron las reuniones con ánimos de lograr el acuerdo de las facilidades extendidas en función a metas fiscales exigidas por el organismo de crédito internacional".

En el mercado también se mencionó que los esfuerzos de organismos oficiales vendiendo AL30 para mantener a raya a las cotizaciones de los dólares financieros arrastraron al resto de bonos.

"Los bonos en dólares se volvieron a mostrar ofrecidos, para dejar al cierre pérdidas de entre 30 y 50 centavos de dólar en promedio para toda la curva", detallaron analistas del Grupo SBS y sumaron: "Los bonos en moneda local corrieron con mejor suerte, operando demandados a lo largo del día para cerrar con subas de entre 0,20% y 2% en promedio tanto para el tramo CER como para los floaters".

Las dudas de los inversores respecto de la deuda argentina crecen al ritmo de las preocupaciones por un rebrote del COVID. "Creemos que la evolución de los bonos será volátil, al estar determinada por acciones que hoy no tienen un camino definido (y menos aún una resolución)", aseguraron desde PPI.

En tanto, los papeles argentinos que cotizan en Wall Street registraron también ganancias. Ternium lideró las subas, al mejorar 5,68 por ciento.