

Los granos cayeron en conjunto en el mercado de Chicago, debido en gran parte a la debilidad de los Estados Unidos para participar en el mercado externo agrícola por el fortalecimiento de su moneda y la amplia oferta existente de los cereales, mientras se aguarda el informe semanal de exportaciones del Departamento de Agricultura estadounidense (USDA).
La soja tuvo una jornada negativa y perdió 0,7% cotizando a 315,18 dólares la tonelada. Las pobres exportaciones estadounidenses, junto al debilitado mercado interno y la caída del precio de la harina hicieron que la presión sobre el precio produzca un retroceso, aunque fue moderado por la buena performance del aceite de la oleaginosa, impulsado por la suba del petróleo.
Por su parte, el maíz siguió el camino de la soja y perdió un insignificante 0,07%, cotizando a 142,42 dólares la tonelada. Las causas de su casi nulo movimiento, con un pequeño ajuste a la baja, se debió a la amplia oferta mundial, el fortalecimiento de dólar, como así también, el incremento en los stocks de etanol, según informó la Agencia de Información Energética de Estados Unidos.
Por último, el trigo no fue la excepción y cayó 0,87% cerrando a 177,57 dólares la tonelada. Las razones reposan en la sobreoferta mundial que existe, el fortalecimiento de la moneda estadounidense, junto a la pobre inserción de la mercadería de ese país en el mercado externo, sumado a buenas condiciones climáticas en las planicies productoras.


