Cedear en jaque: qué mirar en las empresas ante la recesión que se avecina en EE.UU.
El mercado ve con seguridad un aterrizaje forzoso. Dado el actual contexto, las acciones en Wall Street suelen tener una particular dinámica en cuanto al momento en que hacen piso y que comienzan a recuperarse. ¿Cuáles son los sectores más beneficiados durante el ciclo recesivo?
El temor sobre los colapsos bancarios está cediendo en el margen en las últimas semanas.
Lo que vuelve a estar sobre la mesa de discusión y la atención por parte de los inversores es la dinámica inflacionaria y los riesgos recesivos a causa de la suba de tasas de la Fed durante los últimos meses.
El mercado ve con seguridad un aterrizaje forzoso. Dado el actual contexto, las acciones en Wall Street suelen tener una particular dinámica en cuanto al momento en que hacen piso y que comienzan a recuperarse. ¿Cuáles son los sectores más beneficiados en cada momento?
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Crecen los temores de una recesión
Ahora que la Fed pudo controlar la crisis bancaria en EEUU, el mercado vuelve a mirar con atención la dinámica macroeconómica y el futuro de la política monetaria de la Fed.
Tras los datos de inflación de marzo en la que la misma cayó al 5% y los últimos datos del mercado laboral en el que se vio que la economía americana creó menos puestos de trabajo y que los salarios cayeron, ahora se espera que la Fed suba en 25 puntos básicos la tasa de interés durante la reunión del 3 de mayo.
La Reserva Federal llevó la tasa de 0% al 4,75% actual en un año, siendo el ciclo de suba de tasas más agresivo en 40 años.
Ante este movimiento agresivo, el mercado ve con seguridad que la economía americana va camino a una recesión.
La probabilidad de recesión calculada por Bloomberg de cara a los próximos 12 meses es del 65%.
Esta expectativa se puede corroborar al analizar la forma de la curva de bonos del tesoro americana, la cual se muestra con su mayor grado de inversión desde los años '80.
En la última semana, la curva mostró una señal recesiva importante.
Los analistas de Bank of America advierten que cuando la pendiente de la curva comienza a tornarse menos negativa, esa suele ser una señal de cercanía de una recesión.
La semana pasada el spread de tasas entre el bono a 2 y 10 años era -80 puntos básicos y saltó a -65 actualmente.
Esto quiere decir que crecieron las chances de que comencemos a ver señales recesivas en las próximas semanas, dando pasó a un contexto de eventual aterrizaje forzoso.
Tina Fong, estratega de Schroders, afirmó que si bien la economía estadounidense parece más resistente de lo que muchos habían previsto, las recientes turbulencias en el sector bancario han avivado el debate sobre si se producirá un aterrizaje suave o una recesión.
"Nos inclinamos por esta última opción y seguimos pensando que este año se producirá una recesión, teniendo en cuenta el ritmo de endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal", advirtió.
Por otro lado, los analistas de Bank of America lanzaron otra señal de advertencia sobre una posible recesión.
En un informe enviado a sus clientes advirtieron que, cuando el PMI manufacturero del ISM cae por debajo de 45, los riesgos de recesión aumentan significativamente.
De hecho, esto es efectivamente lo que está ocurriendo ya que el sector manufacturero está experimentando una fuerte caída.
Los analistas de Balanz consideran que de cara a las próximas semanas, los sucesos recientes en el sistema bancario pasarán a un segundo plano y el foco girará hacia una economía que empezará a recibir los rezagos de una política monetaria ajustada.
"Antes de los sucesos en el sistema bancario, la economía en EEUU todavía no mostraba signos claros de contracción. Los indicadores precedentes, sin embargo, siguen apuntando a una desaceleración hacia adelante dados los rezagos con los que opera la política monetaria, que es al menos de 12 meses", advirtieron.
En ese sentido, advierten mayores riesgos sobre el nivel de actividad.
"Los riesgos de nuevos sucesos de crédito dentro del sistema bancario los vemos principalmente contenidos, aunque es esperable un endurecimiento en las condiciones de crédito, tal como adelantaron algunos miembros de la Fed que sucederá, pesando aún más sobre la actividad", comentaron.
Actualmente, las probabilidades de ver una suba de tasas de 25 puntos básicos es de 70%, aunque se espera que esta sea la última suba de tasas dentro del actual ciclo de endurecimiento monetario.
Por lo tanto, se especula con que la Fed podrá maniobrar la economía hacia un eventual aterrizaje suave, aunque no podrá evitar una contracción en el nivel de actividad.
Desde el banco de inversión ING también ven mayores riesgos de una recesión y una posterior relajación por parte de la Fed en cuanto a su política monetaria.
"El endurecimiento de las condiciones crediticias combinado con el aumento de los costos de endeudamiento, la caída de la confianza empresarial y un mercado inmobiliario que se debilita rápidamente significan que un aterrizaje forzoso parece cada vez más probable", dijeron.
Además agregaron que "dado que es probable que aumente el desempleo, las presiones salariales se atenuarán y la inflación se desacelerará más rápidamente. Esto debería abrir la puerta a 100 pb de recortes de tasas en el cuarto trimestre con la tasa la Fed fijada en 3% a mediados de 2024"
Por su parte, Martín Polo, estratega jefe de Cohen sostuvo que, con la crisis de los bancos contenida, los inversores se mostraron optimistas ante los datos de menor presión inflacionaria y de desaceleración del nivel de actividad.
"El soft landing vuelve al centro de la escena y aumenta las chances de que la Fed no realice nuevos ajustes de la tasa de interés. La clave para esta semana será la publicación de la inflación de marzo con lo que se completará el cuadro para juzgar el soft landing que tenemos como escenario base", comentó Polo.
Qué significa una recesión para los Cedear
El hecho de que nos encaminemos hacia una recesión no es un dato menor para las carteras, y sobre todo, para el posicionamiento en las acciones.
Según los analistas de Bank of America señalaron que la mayor caída para las acciones se ha dado durante el ciclo recesivo, con bajas que promedian el 32% y con picos de pérdidas de hasta 86 por ciento.
La mayor caída de suele dar durante la recesión y no durante los 12 meses anteriores.
Por su parte, la estratega de Schroders, Tina Fong, explicó que si bien las acciones americanas casi siempre han alcanzado su piso durente las recesiones, estas han repuntado con fuerza hacia el fin del periodo recesivo.
"La recuperación de la renta variable está impulsada por la combinación de unas valoraciones baratas de la renta variable y las expectativas de futuras mejoras de la actividad económica y las ganancias empresariales gracias a la relajación de la política de la Fed. Teniendo en cuenta los escasos rendimientos experimentados durante las recesiones anteriores, los inversores deberían tener cuidado de no perderse la revalorización del mercado", comentó.
Por otro lado, en cuanto a la performance de los sectores, Fong señala que la selectividad es clave durante estos periodos.
"Dado que la renta variable suele registrar pérdidas durante las recesiones, los sectores más defensivos de EEUU, como los productos básicos de consumo y la atención médica, han registrado en promedio los mayores rendimientos. Esto se debe a que los inversores han buscado empresas que ofrezcan una rentabilidad superior y balances sólidos en tiempos de tensión económica", comentó.
Además, advirtió que, en cambio, los sectores más cíclicos del mercado, como el financiero y el industrial, han tendido a ser los que peores resultados han obtenido.
"Algunos de los sectores con peores resultados durante las recesiones, como el de bienes inmuebles y el financiero, se suelen recuperar con fuerza hacia el fin de la recesión. En cambio, los sectores defensivos (como las empresas de servicios públicos) han tendido a registrar fuertes ganancias al comienzo de la recesión, pero pérdidas hacia el final de la misma", detalló.
Finalmente Fong detalló que las acciones, aun transitando momentos de volatilidad, podrían ser una oportunidad de inversión durante periodos recesivos, bajo la expectativa de un cambio de ciclo posterior.-
"El rendimiento de algunos de los sectores cíclicos más sensibles a las tasas, como el de consumo discrecional y el tecnológico, suelen remontar antes de que la recesión haya concluido. Al igual que la revalorización del mercado de renta variable antes del fin de la recesión, estos sectores cíclicos se han beneficiado de que el mercado descuente una recuperación de la actividad económica y de los beneficios empresariales", dijo Fong.
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