Pasaron casi dos años del inicio de la gestión Milei, pero las bombas heredadas de la gestión de Alberto Fernández subsisten. Hoy tendrá lugar otro capítulo en el proceso de desactivación con el pago de los Bopreal 2026 por u$s 1000 millones.
Estos papeles fueron emitidos por el Banco Central para resolver el problema de la deuda comercial que las empresas importadoras tenían con acreedores del exterior.
Fueron creados apenas asumieron Luis Caputo y Santiago Bausili, en Ministerio de Economía y en el Banco Central (BCRA), respectivamente, y se emitieron en tres series con el objetivo de dar una forma de pago en dólares a lo largo del tiempo y así ir normalizando sus compromisos.
También sirvieron para absorber parte de la superabundancia de pesos en la plaza local que amenazaba entonces con llevar al país a una hiperinflación.
Bausili utilizará reservas del BCRA para hacer frente a este compromiso, un paso más en el proceso de normalización de la economía. Si bien la Argentina no luce holgada en esa materia está lejos de la situación existente a principios del 2024, cuando había que hacer frente a vencimientos de bonares y globales y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) estaba caído.
Próximos vencimientos
Pero, ¿qué puede pasar de ahora en adelante? Los próximos vencimientos de deuda significativos aparecen el 9 de enero por u$s 4500 millones. En el mercado financiero se sospecha que en las próximas jornadas se puede anunciar un acuerdo de repo con bancos extranjeros por u$s 2000 millones o más.
Los próximos vencimientos de deuda significativos aparecen el 9 de enero por u$s 4500 millones.
Servirían de puente hasta que se produzca la primera emisión de deuda del país en los mercados internacionales desde el 2018. Para ello, es clave que se encuentre aprobado antes de fin de año el Presupuesto 2026 por el Congreso.
Seguramente lo que veremos desde el 10 de diciembre, cuando asumen los legisladores elegidos el 26 de octubre, es una maratón de sesiones de comisiones y de ambas cámaras para avanzar con ese fin.
El economista Fernando Marull posteó en la red social X un dato relevante: la semana pasada el Gobierno recompró u$s 3700 millones de cobertura cambiaria. Fueron u$s 2300 millones en bonos dólar linked y u$s 1400 millones por las operaciones de dólar a futuro del BCRA. En ambos casos fueron coletazos de la previa electoral.
El riesgo país se muestra con cierta resistencia a quebrar los 600 puntos de piso. ¿Qué pasa? Como siempre desde hace un año, al mercado le gustaría ver al BCRA acumulando reservas.
También hay dos posturas en la plaza: sería una buena noticia que el equipo emita deuda rápidamente en dólares bajo legislación internacional como señal de que recupera el acceso al crédito. Y ello haría bajar riesgo país. Otra visión es que hay que aguardar que baje el riesgo país para emitir deuda. ¿Qué va primero, el huevo o la gallina? ¿Emitir deuda o bajar el riesgo país?
El año que viene debería encontrar al país ya con acceso al mercado de deuda y no utilizando reservas para pagar vencimientos.
El swap con el “tío” Bessent ya acumula u$s 2500 millones de utilización. La incertidumbre política del 26 de octubre quedó atrás. Los desafíos por delante son igualmente relevantes. Restan la modernización laboral y la reforma impositiva pero también la reducción de encajes para facilitar el crédito a empresas y público.




