Reapareció Sturzenegger: ve inflación del 1% a fin de año y reconoció errores

El expresidente del BCRA aseguró que los precios "pueden bajar rápidamente". "Quizás bajé un poco la guardia a fines de 2017", admitió respecto al 28D y planteó la necesidad de un BCRA independiente.

"Los precios de Argentina pueden bajar rápidamente". El que habla es Federico Sturzenegger, un hombre que justamente no pudo domesticarlos.

El extitular del BCRA aseguró en una entrevista a la agencia Bloomberg que la inflación  mensual podría alcanzar el 1% para fin de año.

Las cosas no funcionaron como se esperaba para Sturzenegger cuando se convirtió en el jefe del banco central a fines de 2015 con grandes ideas y mayores desafíos: reducir la inflación a un solo dígito después de años de controles de precios, impresión de dinero continua y estadísticas falsas.

En una entrevista brindada en la sede de Bloomberg en Nueva York, el ahora socio principal de Latus View, una compañía de inversión que se centra en Fintech, rompió por primera vez el silencio tras su salida del cargo.

Entre otros temas, señaló que Guido Sandleris "tiene la oportunidad de triunfar donde durante décadas muchos otros fracasaron en Argentina".

"El proceso de desinflación será sustancial, rápido y más fuerte de lo que nadie espera", si se mantiene la política monetaria actual, aseguró.

"Quizás bajé un poco la guardia a fines de 2017", reconoció.

Pronosticó que el Gobierno "podría llegar al final del año con una tasa de inflación mensual de alrededor del 1%". Los precios al consumidor locales aumentaron 3,1% en mayo respecto al mes anterior, el ritmo más lento desde enero y fuera del máximo de 2019 del 4,7% registrado en marzo último.

Guido Sandleris "tiene la oportunidad de triunfar donde durante décadas muchos otros fracasaron en Argentina", dijo su atencesor.

El econonista aseguró estar convencido de que esta vez los resultados serán dififerentes, ya que el Gobierno tomó una "consolidación fiscal considerable", mientras que el sistema financiero finalmente digirió  un choque monetario que comenzó en agosto pasado cuando el banco comenzó a reducir drásticamente su deuda a corto plazo, inyectando efectivo en la economía.

"La economía debería estabilizarse e incluso crecer a la hora de las elecciones presidenciales a fines de octubre, antes de ganar velocidad el próximo año", agregó y subrayó que "no dudar en la ejecución del plan será clave".

Y agregó: "Dejar que el peso flote libremente fue uno de los principales logros".

Sturzenegger perdió la batalla y, el 28 de diciembre de 2017, sentado junto al jefe de gabinete, Marcos Peña, el Gobierno anunció el cambio en las metas de inflación.

Los mercados reaccionaron negativamente, interpretando el movimiento sorpresa como Macri entrometiéndose en la política monetaria a pesar de haber dicho repetidas veces que el Banco Central era verdaderamente independiente.

"Quizás bajé un poco la guardia a fines de 2017. Pensé que a la economía le iba bien, al proceso de desinflación le iba bien", analizó y sostuvo que "el impacto en la credibilidad fue más como un shock permanente".

Quizás bajé un poco la guardia a fines de 2017. Pensé que a la economía le iba bien

La decisión del 28 de diciembre fue la primera de una serie de eventos que provocaron una crisis monetaria. Con el colapso del peso y la Reserva Federal elevando las tasas de interés, los mercados crediticios esencialmente comenzaron a cerrarse para Argentina, lo que incrementó la presión general.

"La mayor lección de lo que sucedió es que se necesita tener un banco central independiente, y creo que muchos de los costos pagados fueron el resultado de eso. No veo que se haya aprendido esa lección", concluyó Sturzenegger.

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