Latinoamérica podría caer en recesión por virus y el petróleo

La región, que ya se esforzaba por recuperarse del fin del auge de las materias primas y el año pasado fue escenario de protestas callejeras contra la desigualdad, ahora se enfrenta a la posibilidad de retroceder aún más.

América Latina era la región de menor crecimiento del mundo incluso antes de que el coronavirus y el derrumbe del precio del petróleo crearan una tormenta perfecta que podría hundirla en una recesión.

La región, que ya se esforzaba por recuperarse del fin del auge de las materias primas y en 2019 fue escenario de protestas callejeras contra la desigualdad, ahora se enfrenta a la posibilidad de retroceder aún más.

"La combinación de rápida propagación del coronavirus con la caída del precio del petróleo y la venta masiva de activos latinoamericanos podría paralizar por completo la economía de la región", dijo Marcos Casarin, de Oxford Economics, en un informe.

"Nuestras primeras estimaciones para el caso en que la volatilidad financiera se prolongue unos meses más y los precios del petróleo se mantengan cerca de u$s 30 hasta fin de año prevén que Latinoamérica podría perder 0,7% de su PBI en 2020".

Inicialmente, parecía que la región había evitado lo peor de la epidemia, lo que llevó a algunos gobiernos a concluir que el clima cálido y el relativo aislamiento significaban que había poco de qué preocuparse.

Eso cambió drásticamente la semana pasada cuando el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, apareció en Facebook con un barbijo anunciando que uno de sus ayudantes había dado positivo por el virus. Ese mismo día, Argentina prohibió todos los vuelos provenientes de Europa, EE.UU. y tres países asiáticos durante los próximos 30 días

Los bancos y las firmas de investigación están recortando los pronósticos. Capital Economics prevé que América latina, excluyendo a Venezuela, crecerá sólo 0,2% en 2020. Su anterior proyección era 1,2%.

Los precios del cobre retrocedieron 11,6% en lo que va del año y los valores de la soja bajaron 10,8%, mientras que los precios del petróleo se derrumbaron casi 30% a

principios de esta semana.

En Brasil, la mayor economía de Latinoamérica, ya no se espera un repunte del crecimiento de 2% para este año. Bank of America prevé ahora una expansión de 1,5% en 2020. El ministro Paulo Guedes dijo que preparará un paquete especial de medidas económicas para combatir el impacto del coronavirus, insinuando que se podrían relajar las metas fiscales.

Los analistas están divididos en cuanto a la probabilidad de que Brasil disminuya las tasas de interés, dada la difícil elección entre proteger la vulnerable divisa del país y brindar un estímulo interno para compensar el shock del virus en este escenario altamente impredecible. "Guedes dijo hace una semana que si el tipo de cambio caía a cinco reales por dólar, habría hecho las cosas muy mal", contó Zeina Latif, una destacada economista brasileña. "Bueno, [el jueves] llegó a cinco. Y Bolsonaro había dicho que no le preocupaba en absoluto el coronavirus, que los medios de comunicación estaban sembrando el miedo".

El virus llega a Argentina mientras su nuevo gobierno peronista intenta renegociar una deuda superior a u$s 100.000 millones, una tarea difícil, incluso antes de que las prohibiciones de viaje relacionadas con el virus hicieran casi imposible las reuniones cara a cara.

Fuertemente dependiente de las exportaciones de petróleo y con el dólar estadounidense como su moneda, Ecuador ya tenía dificultades para pagar su deuda externa y mantenerse en el camino correcto con un rescate de u$s 4.200 millones otorgado por el FMI. La diferencia de rendimiento entre los bonos del país y la deuda equivalente emitida por el Tesoro de EE.UU. aumentó considerablemente en los últimos días, lo que indica una mayor probabilidad de default.

Entre los otros grandes productores de petróleo latinoamericanos, México se destaca por la débil situación financiera de la petrolera estatal Pemex. Los analistas creen que cada vez es más probable que haya una rebaja de la calificación de Pemex y de los bonos soberanos asociados.

"Claramente, menos dinero para Pemex [debido a la caída de los precios del petróleo] significa menos para los bonos soberanos o más apoyo del Estado a Pemex", señaló Joydeep Mukherji, director de calificaciones soberanas de América Latina en S&P Global. "[La crisis del precio del petróleo] hace que las cosas sean aún más difíciles para el gobierno mexicano".

El gran sector manufacturero de México está particularmente expuesto a las vulnerabilidades de las cadenas de suministro y a su dependencia de un mercado estadounidense en rápida desaceleración.

Las políticas económicas sólidas de Colombia, otro gran productor de petróleo, permiten que el país tenga más espacio para manejar el desplome de los precios del crudo; y la mayoría de los economistas cree que seguirá siendo la economía grande de mayor crecimiento de la región.

Temas relacionados
Más noticias de Virus

Las más leídas de Financial Times

Destacadas de hoy

Noticias de tu interés