Una start-up de energía de fusión afirma haber resuelto el desafío milenario de transformar metales en oro.
La crisopía, comúnmente conocida como alquimia, fue perseguida por civilizaciones desde el antiguo Egipto. Ahora, Marathon Fusion -una start-up con sede en San Francisco dedicada a la generación de energía mediante fusión nuclear- asegura que el mismo proceso podría utilizarse para producir oro a partir de mercurio.
En un artículo académico publicado la semana pasada, Marathon propone que los neutrones liberados durante las reacciones de fusión pueden emplearse para obtener oro mediante un proceso llamado transmutación nuclear.
Aunque el estudio aún no fue revisado por pares, recibió comentarios positivos por parte de expertos en el campo. "En teoría, se ve muy bien y todos con los que he hablado hasta ahora están intrigados y entusiasmados", declaró al Financial Times el Dr. Ahmed Diallo, físico de plasma del laboratorio nacional del Departamento de Energía de EE.UU. en Princeton, quien leyó el estudio.
Marathon fue fundada en 2023 por Kyle Schiller (CEO) y Adam Rutkowski (CTO), ambos de 30 años, como una empresa de ingeniería enfocada en resolver desafíos técnicos de las plantas de energía por fusión.
La start-up cuenta con 12 empleados a tiempo completo y recaudó hasta ahora 5,9 millones de dólares en inversiones y unos 4 millones en subvenciones del gobierno estadounidense. Según Rutkowski, el equipo comenzó trabajando en la eficiencia del sistema de combustión de las plantas de fusión y empezó a considerar las posibilidades de la transmutación nuclear a principios de este año.

Aunque ya se logró sintetizar oro mediante aceleradores de partículas, las cantidades obtenidas fueron mínimas y los costos extremadamente altos. A comienzos de este año, físicos del CERN europeo observaron átomos de plomo convirtiéndose en oro durante colisiones a alta velocidad en el Gran Colisionador de Hadrones.
El enfoque experimental más común para la fusión utiliza un dispositivo llamado tokamak, que calienta dos isótopos de hidrógeno -generalmente deuterio y tritio- hasta temperaturas extremas, permitiendo que se fusionen para formar helio y liberar enormes cantidades de energía en forma de neutrones.
La mayoría de los planes de plantas de fusión prevén usar estos neutrones en combinación con isótopos de litio en una "manta fértil" para generar más tritio que pueda alimentar reacciones futuras.
La propuesta de Marathon consiste en introducir también un isótopo de mercurio, el mercurio-198, en esa manta fértil, aprovechando los neutrones de alta energía para transformarlo en mercurio-197.
El mercurio-197 es un isótopo inestable que se desintegra en aproximadamente 64 horas para convertirse en oro-197, el único isótopo estable del oro.
Según Rutkowski y Schiller, esto permitiría que las futuras plantas de energía por fusión produzcan 5.000 kg de oro por año por cada gigavatio de electricidad generada, sin afectar la generación de energía ni la producción de tritio. A precios actuales, estiman que el valor del oro generado sería comparable al valor de la electricidad, duplicando potencialmente los ingresos de la planta.
"La clave es que se puede usar este conjunto de reacciones con neutrones rápidos para producir grandes cantidades de oro, mientras se mantiene el ciclo de combustible de la planta", explicó Rutkowski, quien trabajó anteriormente en SpaceX.

Un desafío es que la presencia de otros tipos de mercurio puede generar isótopos de oro inestables junto con el oro-197, haciendo que el metal resultante sea parcialmente radiactivo. Rutkowski estima que esto implicaría almacenar el oro entre 14 y 18 años para que se considere completamente seguro.
El proceso también podría aplicarse a la producción de otros metales preciosos, pero Marathon considera que el tamaño del mercado del oro permitiría absorber la nueva producción sin afectar los precios. Actualmente se extraen unas 3.500 toneladas de oro al año.
"El oro está en ese punto justo", afirmó Dan Brunner, exdirector de tecnología de Commonwealth Fusion Systems -una empresa respaldada por Bill Gates- y ahora asesor científico de Marathon. "Desde el punto de vista científico, parece tener coherencia. El desafío será diseñar un sistema que lo haga viable en la práctica."
Aunque los físicos lograron fusionar átomos por primera vez en la década de 1930, todavía nadie logró obtener más energía de una reacción de fusión de la que se necesita para iniciarla. Algunos científicos creen que las plantas de energía de fusión aún están a décadas de distancia, aunque el aumento de la inversión privada ha generado optimismo. Commonwealth, por ejemplo, espera poner en marcha una planta de demostración en 2027 y abastecer de electricidad a Google a principios de la década de 2030.
En los últimos 12 meses hasta julio, las empresas de fusión recaudaron 2.600 millones de dólares, elevando la inversión total en 53 compañías a nivel mundial a 9.800 millones, según el estudio más reciente de la Fusion Industry Association publicado este martes.
Malcolm Handley, cuyo fondo de capital de riesgo Strong Atomics fue el primer inversor en Marathon, afirmó que la posibilidad de generar ingresos con oro mediante energía de fusión permitirá atraer más financiamiento para Marathon y otras compañías del sector.
"Las empresas de fusión se han enfrentado a muchos problemas difíciles", dijo. "El dinero que esto puede liberar hará que todos esos problemas sean más fáciles de resolver."



