Un Brad Pitt "arrogante", acusado de 'saquear' un viñedo en Francia

Brad Pitt "saqueó" el viñedo Château Miraval, del que era copropietario con su ex esposa Angelina Jolie en la Provenza, y gastó millones de dólares en renovar la piscina y en un estudio de grabación, según afirman los abogados que han demandado al actor.

Nouvel, una empresa a través de la cual Jolie fue propietaria de una participación en la bodega francesa, afirmó en una presentación ante un tribunal de California que Pitt y sus socios le debían más de u$s 350 millones. La empresa alegó que "llevaron a cabo acciones cada vez más escandalosas para mantener el control" de Miraval, al tiempo que supuestamente "despojaban [al productor de rosado] de sus activos".

Las acusaciones de que Pitt actuó como un "niño arrogante" mientras se dedicaba a "apropiarse descaradamente del dinero" suponen la última salva en una amarga disputa legal entre las estrellas de Hollywood. Jolie acusó a Pitt de agredirla en estado de embriaguez a ella y a los hijos de la pareja durante un vuelo privado a Estados Unidos.

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Pitt, de 59 años, ha negado las acusaciones de agresión y ha acusado a Jolie en anteriores demandas judiciales de intentar dañar su reputación vendiendo Nouvel, que contenía su parte de Miraval, "a sus espaldas" al grupo Stoli del multimillonario de origen ruso Yuri Shefler por u$s 64 millones en 2021. Pitt sostuvo en documentos anteriores que ambos habían acordado "vender sus intereses por separado sólo con el consentimiento del otro", una afirmación que Jolie ha negado.

Las peleas por el viñedo, que la pareja compró por 25 millones de euros en 2008, tras recorrer propiedades en la costa mediterránea francesa, han dejado al descubierto la profundidad de la disputa doméstica. La marca de vino rosado que crearon con la ayuda del famoso enólogo del Ródano Marc Perrin generó más de 15 millones de euros de ganancias en 2022, según las demandas.

Desde el divorcio, Pitt ha "urdido un plan hasta ahora exitoso para hacerse con el control de facto de Château Miraval", afirmaron los abogados de Nouvel, alegando que había dejado a Stoli, de Shefler, fuera de la gestión de la empresa al negarse a nombrar consejeros neutrales para la junta de la entidad con sede en Luxemburgo a través del cual opera el viñedo.

Los abogados de Pitt no quisieron hacer declaraciones. El equipo de Perrin no respondió a la solicitud de comentarios. Personas con conocimiento de la estrategia de Pitt calificaron las afirmaciones de "absurdas" y aseguraron que las inversiones en la propiedad habían sido "en beneficio del negocio". Señalaron el hecho de que el rosado de Miraval había sido clasificado recientemente como el mejor de la Provenza por la revista Le Figaro.

Los abogados de Pitt habían acusado anteriormente a Shefler y Stoli de intentar una "adquisición hostil" del viñedo, donde se casaron los dos actores. Pitt también mantiene que aún posee el 60% de la finca, alegando que sólo transfirió "nominalmente" el 10% a Jolie en 2013.

El equipo jurídico de Nouvel aseguró que Jolie había tratado inicialmente de vender su parte de Miraval a Pitt, pero dio marcha atrás porque él condicionó el acuerdo a que ella firmara un acuerdo de no separación.

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Alegaron además que Pitt había malgastado "millones en proyectos de vanidad, entre los que se incluían más de un millón de dólares en renovaciones de la piscina, la construcción y reconstrucción de una escalera cuatro veces, y el gasto de millones para restaurar un estudio de grabación". Añadieron que Pitt gastó "casi un millón de euros al año en reconstruir constantemente muros de piedra utilizando canteros de Croacia", y cerca de 3 millones de euros en gastos no especificados como "trabajos de confección".

En la presentación, la empresa de Shefler acusó al equipo de Pitt de lanzar una "campaña de difamación xenófoba y falsa, digna del mismísimo [Vladimir] Putin" contra el empresario de origen ruso, del que dijeron que se había visto obligado a exiliarse por sus críticas al Kremlin y por haber defendido los derechos del colectivo LGTB+. Los abogados de Pitt habían alegado anteriormente que la propiedad de Stoli "amenaza con dañar la reputación y la marca cuidadosamente perfeccionadas de Miraval" debido a sus supuestos vínculos con agentes estatales rusos y saudíes.

Nouvel afirmó que Pitt también cedió a Perrin la mitad del valor de las marcas registradas de Miraval, sin el permiso expreso del antiguo holding de Jolie, que es copropietario. Las marcas se registraron originalmente con vistas a una posible empresa conjunta con el grupo de artículos de lujo LVMH, según aseguró Nouvel en los documentos judiciales, aunque dicha operación nunca se llevó a cabo.

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A principios de este año, LVMH compró una participación mayoritaria en Château Minuty en Provenza, que se suma a la ya adquirida en 2019 en otra bodega local de vino rosado, Château d'Esclans.

En respuesta a las afirmaciones de que Jolie "no hizo nada de lo necesario para el éxito de Miraval", sino que "se mantuvo al margen mientras Pitt invertía dinero y sudor en la casa y el negocio", los abogados de Nouvel dijeron: "El respaldo de Jolie y Pitt es lo que hizo que la marca Miraval tuviera éxito, más éxito que los rosados competidores de Famille Perrin".

Discutieron que Pitt, que ha ganado premios de la Academia como productor y actor, se hubiera dedicado profundamente a la viticultura. "Pitt es un actor, no un viticultor. Trafica con ilusiones, no con tierra y uvas", escribieron.