

Repsol Sinopec, operadora del descubrimiento más importante realizado por una empresa privada en la región de exploración pre-sal en Brasil, invertirá u$s 947 millones en el país este año, casi u$s 200 millones más que en 2011. El nuevo presidente de la compañía, José Maria Moreno, que llegó al país en abril, no esconde su entusiasmo ante los nuevos desafíos.
Moreno explicó que las inversiones superarán las que fueron detalladas por Repsol en su plan de negocios conocido recientemente. La española divulgó inversiones por el equivalente a u$s 1.508 millones en el campo de Sapinhoá y u$s 1.005 millones en el campo Carioca entre 2012 y 2016. Pero el ejecutivo afirmó que esos valores se refieren solamente a la participación de 60% de Repsol y no incluyen el 40% que cabrá a Sinopec, por lo que los desembolsos en los dos campos, en el antiguo bloque BM-S-9, serán de u$s 2.513 millones y u$s 1.675 millones, respectivamente. La empresa tiene 25% del bloque, que se conocía con el nombre de Guará.
Moreno, que trabajó en Repsol Argentina y Repsol Bolivia, señaló que por ahora Sapinhoá será el destino que recibirá el mayor aluvión de inversiones de la empresa. Operado por Petrobras, se prevé que comience a producir en el inicio de 2013, y que en 2015 produzca 250.000 barriles diarios.
La estatal china Sinopec adquirió 40% de los activos de Repsol en Brasil al participar de un aumento de capital de la empresa en 2010. El dinero que entró permaneció en la caja, que tiene u$s 6.000 millones. Según el acuerdo, Repsol nombra al presidente de la compañía brasileña y Sinopec al director financiero. Moreno explicó que trabajan once chinos en la compañía, que cuenta con 300 empleados, incluyendo los tercerizados.
El descubrimiento de Repsol Brasil que generó más expectativa lleva el nombre de una de las bellezas naturales de Rio -Pao de Acucar-y está ubicado en la región pre-sal de la cuenca de Campos. Repsol Sinopec encontró 1.200 millones de barriles recuperables, en un campo gigante de petróleo muy liviano (48 grados en la escala de la Sociedad Americana de Petróleo), dos campos más chicos y 3 billones de pies cúbicos (TCFs) de gas.
Moreno afirmó que Repsol "nunca vio" una estructura tan grande como la de ese depósito, que cuenta con una estructura de hidrocarburos de 500 metros de extensión. "Es el más grande de los campos que conocemos. Tenemos suerte de ser los operadores", dijo, además de negar contar con información sobre otras áreas como el campo supergigante denominado Lula (que operan Petrobras, BG y Galp Sinopec), donde las reservas se estiman en 6.500 millones de barriles. El Pao de Acucar fue el tercer hallazgo de la empresa en el bloque BM-C-33, donde encontró otros dos reservorios, Seat y Gávea, de menor tamaño. Solamente para delimitar las reservas de los tres, Moreno prevé una inversión de u$s 1.000 millones con la perforación de nuevos pozos, antes de declarar su potencial comercial. "Si confirmamos mayores recursos, entraremos en la etapa de desarrollo de la producción. Y entonces las inversiones serán de u$s 10.000 millones, de los cuales el 35% como Repsol Sinopec, o 21% como Repsol", explicó el ejecutivo.
Repsol Sinopec está discutiendo con Petrobras y Statoil, sus socias en el BM-C-33, las alternativas para producir el petróleo y el gas, un proceso más difícil. Pao de Acucar está en aguas ultraprofundas, a 195 kilómetros de la costa.
El gas encontrado en el mar no puede quemarse en la atmósfera, y existen en estudio alternativas para después de 2016. Moreno señaló que la empresa analiza qué modelo de producción aplicará en la región. Una de las alternativas es instalar una plataforma del tipo Spar (sin almacenamiento), donde el petróleo y el gas se separarían y transportarían a través de un oleoducto y un gasoducto hasta el continente. Otra sería instalar una plataforma tipo FPSO y un gasoducto; o una FPSO combinada y una plataforma fluctuante para licuar el gas natural (LNG FPSO). "Para mí, lo que tiene más sentido es llevar el gas a tierra porque siempre hay más alternativas", deslizó Moreno.
Según el ejecutivo, hasta 2019 Brasil contará con excedente de gas y la única manera de moverlo será a través de un proceso de licuado.
Moreno evitó hablar sobre lo que ocurrió con la empresa en Argentina, donde el gobierno tomó el control de YPF. Pero afirmó que la situación no afectará las inversiones en Brasil. Además, señaló que aguarda la 11 Ronda de Licitaciones de la Agencia Nacional de Petróleo para adquirir nuevas áreas exploratorias .
Por ahora, cuenta con los ingresos de la venta de petróleo que corresponde al 10% que detenta en el campo Albacora Leste, de Petrobras.