En esta noticia

Egipto ha sido durante siglos sinónimo de pirámides, historia y turismo. Sin embargo, existe otro país africano que supera con creces en cantidad de estructuras piramidales: Sudán. Este territorio alberga más de 250 pirámides, la mayoría en las regiones de Meroë, Nuri y El Kurru.

A pesar de este patrimonio extraordinario, reconocido por la UNESCO, Sudán apenas recibe 5000 turistas al año, en contraste con los más de 15 millones que visitan Egipto.

Este olvido no responde a una falta de atractivo. Las pirámidessudanesas, aunque más pequeñas y puntiagudas que las egipcias, conservan relieves y decoraciones únicas.

El país ofrece una experiencia arqueológica sin multitudes, en paisajes que aún conservan su autenticidad. Sin embargo, la inestabilidad política, el conflicto armado y el colapso económico han convertido a Sudán en uno de los destinos más inseguros del planeta.

¿Por qué Sudán no logra atraer turistas pese a su patrimonio?

La respuesta es clara:Sudán se encuentra sumido en una crisis profunda. Desde 2019, el país vive una serie de convulsiones políticas que culminaron con una guerra civil en 2021.

Esta situación ha deteriorado gravemente la infraestructura, cerrado aeropuertos, paralizado rutas terrestres y puesto bajo control militar varias zonas del país. En este contexto, visitar los yacimientosarqueológicos no solo es difícil: en muchos casos, es directamente imposible.

Además, Sudán ha quedado aislado del turismointernacional. La ausencia de campañas de promoción, las dificultades para obtener visados y la falta de servicios básicos desalientan incluso a los viajeros más aventureros.

Este territorio alberga más de 250 pirámides, la mayoría en las regiones de Meroë, Nuri y El Kurru. Fuente: archivo.
Este territorio alberga más de 250 pirámides, la mayoría en las regiones de Meroë, Nuri y El Kurru. Fuente: archivo.

Las pirámides de Meroë, declaradas Patrimonio de la Humanidad en 2011, apenas reciben más que arqueólogos y especialistas. El turismo, en estas condiciones, es más una utopía que una realidad.

¿Puede el turismo convertirse en motor de recuperación para Sudán?

Aunque hoy parezca lejano, el potencial turístico de Sudán es real. En 2018, antes de la escalada del conflicto, el país superó los 800.000 visitantes. Si se lograra estabilizar la situación política y garantizar mínimas condiciones de seguridad, el turismo cultural podría convertirse en una fuenteimportante de ingresos y empleo.

¿Puede el turismo convertirse en motor de recuperación para Sudán? Fuente: archivo.
¿Puede el turismo convertirse en motor de recuperación para Sudán? Fuente: archivo.

Sudán cuenta con un legado histórico sin igual, listo para ser descubierto por el mundo.

El desafío no solo es político, sino también estructural. Requiere inversión en infraestructura, capacitación de guías, mejoras en transporte, señalización y servicios básicos.

A largo plazo, el país necesitaría diseñar una estrategia para reinsertarse en el mapaturístico global. Pero antes, debe cesar el conflicto. Sin paz, ni el mayor tesoro arqueológico podrá competir con el miedo.