

Elegir libremente a quién dejar el patrimonio al fallecer no es posible en España. El Código Civil obliga a dividir la herencia en tres tercios: la legítima, el tercio de mejora y el de libre disposición. Esto impide que el testador designe a sus herederos sin restricciones.
La legítima es la parte intocable de la herencia, reservada a los llamados herederos forzosos. Según la normativa, "se trata de los hijos y descendientes (nietos y biznietos), a falta de estos serán los padres y ascendientes (abuelos) y el cónyuge, que siempre será legitimario, si bien su legítima es en usufructo".

¿Qué es la legítima y por qué divide opiniones?
La legítima limita la libertad del testador y genera un intenso debate jurídico. Quienes la defienden sostienen que protege a los más vulnerables, como viudos y huérfanos. Sus detractores la consideran una medida obsoleta.
El abogado Ramón Casanova opina que, con el aumento de la esperanza de vida, "cuando fallecen los padres los hijos ya son mayores y tienen la vida hecha. No necesitan de un porcentaje de la herencia de sus padres para sobrevivir". Por ello, propone adaptar la figura a los cambios sociales.
En la misma línea, Pablo González, del Grupo Hereda, afirma que la imposición de la legítima es "excesiva" y subraya que cada "persona debe ser libre para elegir los herederos a los que destinar su patrimonio".
Por el contrario, Rocío Ocaña, socia y abogada de Marín y Mateo abogados, sostiene que la legítima no desaparecerá pronto porque "está muy arraigada por lo que no va a desaparecer en breve".
Diferencias entre comunidades autónomas
La aplicación de la Ley de Sucesiones varía según la comunidad. En Navarra no existe la legítima y el testador dispone de total libertad. En Aragón, representa el 50% y puede repartirse en forma desigual.
En Cataluña y Galicia, la legítima se reduce al 25%. En esta última, además, el cónyuge ocupa el primer lugar en la línea sucesoria. En Baleares, el porcentaje depende del número de herederos y puede llegar al 50%.
Para Pablo González, estas diferencias crean un "agravio comparativo entre regiones, por lo que lo más justo sería que todas se rigieran por la misma normativa".
¿Cómo evitar la legítima para herencias en España?
Aunque el Código Civil establece límites, existen dos formas de evitar la legítima:
Desheredar a los herederos forzosos. Para ello, debe demostrarse mediante sentencia firme que cometieron delitos contra el testador, lo amenazaron, lo obligaron a cambiar el testamento o lo maltrataron.
Donar bienes en vida. Si el causante entrega propiedades a los herederos en vida, a cuenta de su legítima, estos no podrán reclamarla después del fallecimiento.



