La psicología es una ciencia social que busca comprender cómo y por qué las personas piensan, sienten y actúan de la manera en que lo hacen, tanto a nivel individual como grupal. Para ello, los profesionales que la utilizan basan su trabajo en una amplia gama de técnicas basadas en diversas investigaciones científicas hechas al respecto, según explica la American Psychological Association.

Más allá del abanico de terapias que existen hoy por hoy, esta ciencia utiliza algunas teorías que pueden llegar a resultar de gran ayuda, como es el caso de la metáfora mente velcro-mente teflón. Esta idea es la que sostiene la psicóloga Patricia Ramírez en una de sus últimas publicaciones en redes sociales: "Imagínense que en la mente tenemos las dos posibilidades: tener una mente teflón o una mente velcro".

Patricia Ramírez, psicóloga, explica cómo cambiar de mentalidad: "No es solamente lo que te dices, sino también..."

Cambiar la forma de pensar a veces es más sencillo de lo que parece. En primer lugar, la experta recomienda alejarse de todo aquello que nos perjudica a nivel psicológico, tales como las críticas, la opinión de otras personas, los comentarios negativos, el autosaboteo, entre otras.

"Todo eso a partir de ahora es teflón. Ustedes visualizan esa parte del cerebro y cómo aquello que llega te puede hacer daño, doler, porque no va a cambiar nada de ti, porque no suma. Nos resbala y lo dejamos estar", explica Ramírez.

Cómo activar la "mente velcro"

Por otra parte, se encuentra la zona "velcro" que es "todo aquello que se queda adherido". Entre estas se encuentra "aceptar nuestra parte vulnerable sin juzgar y sin criticar".

Además, se debe valorar positivamente las "experiencias bonitas que ocurren durante el día", como pasear, recordar un momento gracioso, etc. "Todo aquello que te ayude a sentirte valiosa como persona. No es solamente lo que te dices, lo que piensas, sino las experiencias de la vida", concluye esta experta.

Esta metáfora que recoge la psicóloga hace referencia a la terapia de Aceptación y Compromiso (ACT). Este tipo de terapia ayuda a las personas a distanciarse de aquellas cosas que no podemos controlar, lo que permite tomar perspectiva y aprender a "estar presentes en nuestro día a día".