

Los conductores españoles deben saber que al comprar un coche, ya sea nuevo o de segunda mano, están obligados a pagar ciertos impuestos, como el IVA o el ITP, dependiendo del caso. Sin embargo, surge la duda sobre si es necesario declarar esta transacción a Hacienda.
Algo que todo conductor debe saber es que, si adquiere un coche de segunda mano, ya sea a un particular o a un concesionario, no tiene que declararlo en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Esta obligación solo recae en el vendedor si obtiene una ganancia patrimonial. No obstante, como comprador, es importante estar al tanto de otras obligaciones tributarias que pueden surgir.
Compra de coche de segunda mano: impuestos a considerar sin necesidad de declaración a Hacienda

Al adquirir un coche nuevo en España, se debe abonar el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) del 21 %. En cambio, al comprar un coche de segunda mano a un particular, no se paga IVA, pero se debe liquidar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP).
Este impuesto, que corresponde al proceso de compraventa, es responsabilidad del comprador y varía entre el 4 % y el 8 % del precio del vehículo, dependiendo de la comunidad autónoma. Para su pago, es necesario completar el modelo 620 de Hacienda o el 621 si se presenta en línea.
Además del ITP, el comprador debe asumir el impuesto de circulación y, si el vehículo es importado, el impuesto de matriculación.
Cambio de titularidad: Obligaciones del comprador además del ITP
Junto al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, el comprador debe encargarse de cambiar la titularidad del vehículo en un plazo de 30 días tras la firma del contrato de compraventa.
Esta gestión se realiza ante la Dirección General de Tráfico, donde se requerirá el justificante del pago del ITP, el abono de la tasa 1.5 (55,70 euros) y otros documentos como el permiso de circulación, la ficha técnica del vehículo, el contrato de compraventa y el DNI de comprador y vendedor.
Si utilizas una gestoría, deberás abonar sus honorarios. Sin embargo, si eres Socio del RACE, contamos con un servicio de transferencia de vehículos que te asistirá en todo el proceso de compra de un coche de segunda mano.
Al adquirir un coche de segunda mano, no es necesario declararlo a Hacienda. No obstante, si decides venderlo en el futuro y obtienes una ganancia patrimonial, deberás declararlo en la renta, lo cual es poco común a menos que se trate de un coche de colección o clásico que haya aumentado su valor con el tiempo. En caso contrario, no será necesario declararlo en el IRPF.



