El té que lo "cura todo": tiene probióticos, ayuda a la pérdida de memoria y reduce el dolor

Gracias a la cantidad de beneficios que los productos probióticos tienen para la salud, se han vuelto tendencia dentro de lo que es la alimentación saludable.

Esto se debe a que se componen de microorganismos vivos que actúan en el aparato digestivo como un "bloqueo" para las bacterias "malas" y ayudan al proceso, entre otros puntos.

Si bien se los puede encontrar de manera natural en alimentos como el yogurt, que es popular por eso también, hay otros que hasta hace poco no eran tan conocidos en España. El kimchi o la kombucha son ejemplos. La kombucha es una bebida ancestral de origen chino que se consume en forma de té.     

Qué beneficios tiene consumir té de kombucha 

Es una infusión fermentada que es considerada uno de los brebajes más sanos gracias a sus grandes cualidades probióticas y bajas calorías. 

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), sin embargo, ha alertado que esta bebida "no tiene gran interés nutricional, a excepción de su contenido en vitamina B y algunos aminoácidos".

Pero, lo que sí está comprobado es su poder probiótico, que se consigue gracias a la fermentación de té, azúcar y el "Scoby": "una colonia de simbiótica de bacterias y levaduras" según explican Raúl de Frutos y Fernando Martín, fundadores "Víver Kombucha" a la agencia Europa Press.  

Además, el té de kombucha es una bebida que aporta tan solo 30 calorías por cada 100 mililitros. 

Las bacterias y levaduras que contiene la kombucha ayudan a reforzar el sistema inmunológico. Sin embargo, es importante considerar que "estos beneficios se pueden quedar solo en agua coloreada con azúcar, sino se mantiene un proceso de producción responsable que garantice la correcta elaboración del té kombucha", advierten los expertos.

¿Cómo preparar té de kombucha?

Ingredientes

• Agua: 750 ml
• Té negro o verde: 2 bolsitas
• Azúcar negra orgánica: 250 gramos
•  Scoby (el hongo iniciador que se consigue en dietéticas y tiendas naturistas)

Además, necesitarás un recipiente grande de vidrio y un lienzo fino.

Elaboración

1. Hervir el agua. 
2. Añadir 2 bolsitas de té y media taza de scoby activado.
3. Tapar la preparación y dejar reposar durante 20 minutos.
4. Quitar las bolsitas y añadir el azúcar.
5. Enfriar y consumir durante la primera semana.