

ElServicio Extremeño de Salud (SES) ha confirmado este lunes el cuarto fallecimiento por fiebre del Nilo Occidental en Extremadura, España, el de un varón de 91 años que estaba ingresado en el Hospital Don Benito-Villanueva, y ha notificado que, en total, se han registrado 22 casos este año.
Según ha anunciado la agencia de noticias EFE, de estos casos cuatro fueron asintomáticos, detectados por el Banco de Sangre, y cuatro fallecidos.
En nota de prensa, la Junta ha especificado que dos pacientes continúan ingresados en el Hospital Don Benito-Villanueva y uno en el Hospital de Mérida, por lo que el SES ha informado a las gerencias de las ocho áreas de salud de Extremadura para que se mantengan en situación de vigilancia ante cualquier sospecha de casos de clínica compatible.
Así, podrán mantener una actitud de alerta frente a posibles casos, que permitirá aumentar la capacidad diagnóstica, aunque "el 80 por ciento de las infecciones en humanos son asintomáticas".

Fiebre del Nilo: cómo se contagia la enfermedad
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el virus del Nilo Occidental puede causar una enfermedad mortal del sistema nervioso. Se encuentra por lo común en África, Europa, el Oriente Medio, América del Norte y Asia occidental.
Asimismo, han asegurado que la infección del ser humano suele ser el resultado de las picaduras de mosquitos que se infectan cuando pican a aves infectadas, en cuya sangre circula el virus durante algunos días.
De ese modo, el virus pasa a las glándulas salivales del mosquito, que cuando pica puede inyectar el virus a los seres humanos y los animales, en los que luego se multiplica y puede causar enfermedad.
También puede transmitirse por el contacto con otros animales infectados o con su sangre u otros tejidos, y el periodo de incubación suele durar entre 3 y 14 días.
Fiebre del Nilo: cuáles son las medidas de prevención del virus
En 2024, se registraron 32 casos de fiebre del Nilo Occidental y tres fallecidos en la región, lo que llevó al Servicio Extremeño de Salud (SES) a reforzar las medidas de prevención frente al mosquito transmisor. Entre las principales recomendaciones sanitarias se destacan:
- Mantener en buen estado piscinas, estanques y balsas.
- Vaciar objetos que acumulen agua como platos de macetas, cubos, juguetes, recipientes de animales domésticos o neumáticos.
- Tapar contenedores con agua en el exterior y mantener limpios los canalones y desagües.
- Vestir ropa de colores claros, preferentemente de manga larga, pantalones largos y calzado cerrado.
- Evitar perfumes, jabones aromatizados o aerosoles, que pueden atraer a los insectos.
- Usar repelentes e insecticidas autorizados en formato de loción, espray o pulsera.
- Instalar mosquiteras en puertas y ventanas para impedir la entrada de mosquitos.

Fiebre del Nilo: cuáles son los síntomas de la enfermedad
En los casos más graves, la fiebre del Nilo Occidental puede evolucionar hacia una enfermedad neuroinvasora, que afecta el sistema nervioso central y puede derivar en encefalitis, meningitis o poliomielitis del Nilo Occidental.
Según la Organización Mundial de la Salud, solo una de cada 150 personas infectadas desarrolla esta forma severa, que puede ser potencialmente mortal. Los grupos con mayor riesgo son los mayores de 50 años y las personas inmunodeprimidas, como quienes han recibido trasplantes. Entre los principales síntomas de afección grave se encuentran:
- Dolor de cabeza intenso.
- Fiebre elevada.
- Rigidez de nuca.
- Estupor o pérdida parcial de la conciencia.
- Desorientación y confusión.
- Temblores y convulsiones.
- Debilidad muscular.
- Parálisis.





