CRECE EL MALESTAR SINDICAL POR EL DETERIORO DEL EMPLEO

Movimientos sociales y pymes suman su apoyo a la marcha de la CGT contra el Gobierno

La central logró nuevas adhesiones a la movilización que hará el 7 de marzo. Mañana se reúne la mesa chica para evaluar fecha del primer paro nacional contra la gestión Macri

Mientras sigue preparando el terreno para profundizar su plan de lucha ante la falta de gestos oficiales para descomprimir la tensión, la CGT sumó en las últimas horas el apoyo de movimientos sociales y representantes empresarios de las pymes a la movilización que planea concretar el próximo 7 de marzo para repudiar la política económica del Gobierno y exigir un freno a los despidos.

"Lo que se ha agotado es el tiempo. La lógica de la zanahoria perdió el encanto. Tienen que aparecer los resultados", exigió ayer Juan Carlos Schmid, uno de los miembros del triunvirato de conducción cegetista, al justificar la decisión de la central de endurecer su posición hacia la administración de Mauricio Macri. Con similar visión crítica, Gerardo Martínez, el jefe de la Uocra, uno de los sectores más golpeados por el deterioro del empleo con más de 80.000 despidos, también defendió la determinación cegetista de profundizar las medidas de fuerza y aseguró que "solo falta ponerle fecha" a un paro nacional.

Sin embargo, Martínez se diferenció de Schmid respecto a la ruptura de las negociaciones con el Ejecutivo y pidió que la central mantenga el diálogo pero con una actitud "más agresiva". Aunque expuso con claridad que la CGT rechazará cualquier intento oficial de intentar imponer en ese diálogo un tope de 18% a los aumentos salariales o alentar propuestas para reformular los convenios colectivos.

"El Gobierno puede plantear un valor como referencia (para los salarios) pero no hay ninguna coincidencia en ese valor", dijo el gremialista en declaraciones a FM Radio con Vos. Y en cuanto a los planteos de reformas laborales o cambios convencionales, cuestionó puntualmente el acuerdo por Vaca Muerta, que el Ejecutivo promueve como modelo para otras actividades, al advertir que "se cedió de más, en alusión a las adecuaciones que aceptó hacer el gremio petrolero.

El debate puertas adentro de la primera línea de la central sobre los pasos a seguir de cara a la movilización del 7 de marzo y el eventual paro general para la segunda quincena de ese mes continuará mañana en una charla reservada de la denominada "mesa chica". A la par, el triunvirato sindical se concentrará en sumar la mayor cantidad de respaldos a su plan de lucha. Ya la semana pasada la entidad dio un paso importante en ese objetivo con la decisión de las dos CTA de acompañar la movilización impulsada por los gremios industriales al Ministerio de Producción para protestar contra la multiplicación de despidos en el sector.

En las últimas horas también se plegaron a la convocatoria las principales organizaciones sociales, molestas por las demoras del Gobierno en reglamentar la ley de Emergencia Social, y algunas cámaras que agrupan a pequeñas y medianas empresas. "Vamos a acompañar y trabajar en conjunto para apoyar cualquier iniciativa que defienda la continuidad de nuestras empresas. Las pymes somos quienes generamos más del 70% del trabajo en la Argentina, por eso los dirigentes de la CGT han comprendido que si las pymes están en crisis, el empleo y los trabajadores también lo están", afirmó ayer el titular de la Cgera, Marcelo Fernández, al anunciar la adhesión de esa entidad en la movilización. La Cgera junto a otras cámaras pymes prevén para mañana un encuentro con el triunvirato que integran Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña para coordinar su participación en la protesta.
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