Macri mejora en política pero se estanca en economía, según un think tank alemán

Los indicadores de transformación política y de gobernanza que elabora el BTI marcan mejoras desde que nació el índice en 2006. Pero en economía mantiene el puntaje de la etapa kirchnerista.

Un influyente think tank alemán indicó que Argentina escaló posiciones en el índice que analiza transformaciones económicas, políticas y de gobernanza entre 129 países, en su mayoría, en vías de desarrollo. El Bertelsmann Transformation Index (BTI) ubica al país en el puesto 23 y así la gestión de Mauricio Macri apenas mejora los resultados de la primera etapa del kirchnerismo (2006-2008). El informe de uno de los medios de comunicación más poderosos del mundo advierte la mejora del gobierno de Cambiemos, pero también enciende luces amarillas al presidente Mauricio Macri por su rumbo económico.

Argentina obtuvo un 7.27 (en la escala de 1 al 10) en el índice de transformación del BTI y quedó en el puesto 23, sólo uno por debajo de Brasil, y bien lejos de Chile y Uruguay. El índice muestra una mejora sustancial respecto al segundo mandato de Cristina Fernández, y marca que subió 10 posiciones desde 2012.

Los motores de este crecimiento son los indicadores políticos y también de gobernanza, que incluye ítems como respetar la división de poderes o la búsqueda de consensos. En 'transformación política' obtuvo un 8 y resalta la capacidad de Macri para mantener diálogo con el peronismo y balancear el poder. Ahora bien, advierte que en Argentina hay tres actores políticos con capacidad de veto que son los gremios, las grandes empresas y el sector financiero. El índice advierte que la relación con los gremios es tensa y que Macri tuvo que abandonar su sendero de reforma y hacer concesiones con estos actores.

En 'gobernanza' obtuvo un 6 pero es un crecimiento si se lo compara con el kirchnerismo. Entre algunos puntos que destaca se encuentra la capacidad de Cambiemos de negociar con la oposición en el Congreso, las provincias y sectores de la sociedad civil.

Las luces amarillas se encienden en el ítem económico que obtuvo un puntaje de 6,54 que es el mismo nivel que hubo durante el kirchnerismo. El informe advierte que los resultados en esta área vienen cayendo desde 2012. Y respecto a la gestión de Macri marca que el consumo cayó y que empresas chicas y medianas están en crisis por la liberación de importaciones. A su vez, advierte sobre la alta inflación y el déficit fiscal.

índice que analiza transformaciones económicas, políticas y de gobernanza entre 129 países

El doctor en Historia y especializado en estudios latinoamericanos, Hauke Hartmann, expuso los resultados la semana pasada, en un evento organizado por el Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL). Tras su paso por Buenos Aires, respondió a El Cronista.

-¿Percibió cambios estructurales en Argentina en los últimos años? ¿La región se mueve en la misma dirección?

-Con Macri, sólo se corrigieron las distorsiones cambiarias y las restricciones monetarias, así como restricciones en comercio exterior y cambió la expansión de subsidios que se introdujeron en 2002 con el peronismo. Sin embargo, el progreso en la regulación del sector privado y las medidas de economía de mercado falta que estén acompañadas con mejoras en los indicadores macroeconómicos o sociales. Aún más, la alta inflación junto con las reducciones a los subsidios de energía que encarecieron las tarifas de gas y electricidad complicaron severamente el bolsillo de ciudadanos y de pequeñas y medianas empresas, especialmente. En un contexto de apertura de los mercados y aumento de la competencia, las pymes en particular lucharon para hacer frente a un rápido declive en la demanda interna, a menudo respondiendo con despidos. En los últimos meses es preocupante una tendencia general hacia reformas estructurales y más liberalización vaya acompañado con un estilo más vinculado al dirigismo de la gobernanza económica, como en la reforma tecnocrática y no consultiva del sistema de jubilaciones o la invasión de la independencia del banco central.

De hecho, con los indicadores sociales cayendo y la performance económica sin mejorar sustancialmente, Macri debería haber perdido las elecciones de medio término. Que no haya ocurrido muestra que la población argentina en su mayoría en realidad percibe la necesidad de un profundo cambio estructural. Lo que podemos observar es que la clásica división entre izquierda y derecha en Argentina, y en términos latinoamericanos, se ha agotado. Argentina, y más general en términos latinoamericanos, en realidad se ha agotado. Hay parte de una agenda más conservadora y pro mercado (como la defensa de la propiedad privada, la creación de reglas de una economía de mercado sólida, la corrección de distorsiones y de la intervención del Estado) que es compartida por una amplia plataforma electoral que a su vez quiere ver una agenda más de izquierda (como mejorar la inclusión social, mejorar los servicios sociales como la salud o la educación para todos, una postura fuerte contra la corrupción y más responsabilidad social de las elites económicas).

En ese contexto, no estoy de acuerdo con la postura de que vimos un ascenso y caída de una marea rosa de gobiernos izquierdistas en la región. Me gustaría diferenciar los gobiernos izquierdistas-populistas como el de Ecuador, Nicaragua. Cristina Fernández en Argentina y, obviamente, Venezuela, que socavaron el marco de economía de mercado (y al final también la inclusión social), de los gobiernos de izquierda reformistas como el de Brasil bajo el PT, Chile con la Concertación, Costa Rica o Uruguay, que combinaron sólidas reformas económicas de mercado con políticas orientadas a una mayor inclusión social. La diferenciación es importante y yo creo que no estamos viendo un declive del apoyo a las políticas izquierdistas en general, sino que sólo contra el estilo intervencionista y dirigista. Así que mientras la región no se está moviendo en la misma dirección, hay una agenda de economía de mercado con fuertes aspectos de inclusión social que es atractiva para muchos votantes. Sería bueno tener en cuenta esto antes de ser testigos de un nuevo aumento del populismo en la región.

Temas relacionados
Más noticias de think tank

Las más leídas de Economía y Política

Destacadas de hoy

Noticias de tu interés