Faurie se baja del G20 y espera cerrar en Bruselas el acuerdo Mercosur-UE

El canciller está desde el miércoles en la capital política del viejo continente en constantes tratativas con las autoridades del bloque para llegar a un "acuerdo político" que destrabe una negociación que lleva 20 años en curso.

El ministro de Relaciones Exteriores Jorge Faurie definió ausentarse de la Cumbre de Líderes del G20, que empieza este viernes en la ciudad japonesa de Osaka, donde ya se encuentra el presidente Mauricio Macri, con la expectativa de concluir en Bruselas el acuerdo de asociación estratégica que negocian el Mercosur y la Unión Europea (UE) para la conformación de un mercado único de más de 700 millones de consumidores.

El canciller, al mando de una delegación oficial que también integran el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica; la secretaria de Comercio Exterior, Marisa Bircher, y el secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Horacio Reyser, llegó el miércoles por la noche a la capital política de Europa procedente de Nueva York con la intención de despejar los puntos pendientes con los comisarios de Comercio y Agricultura del bloque, que despiertan un férreo rechazo de sectores productivos de un lado y del otro del Atlántico.

Faurie y sus pares de Brasil, Ernesto Araújo; Paraguay, Luis Castiglioni, y el Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, entraron a las 9 (hora europea) del jueves a las oficinas de la Comisión Europea en la capital belga para discutir con los encargados de Comercio, Cecilia Malmström, y Agricultura, Phil Hogan. A las 21, las deliberaciones continuaban sin un cierre claro y por tal motivo Faurie definió permanecer en la ciudad, con la expectativa de cerrar este viernes y preparar el anuncio de un "acuerdo político".

 

Optimismo y rechazo a la vez

Desde que funcionarios europeos y sudamericanos levantaron el optimismo sobre la proximidad del cierre, los sectores productivos que se sienten amenazados redoblaron la presión ante sus gobiernos.

Tal presión produjo que el presidente francés, Emmanuel Macron, junto a los primeros ministros de Irlanda, Leo Varadkar; Bélgica, Charles Michel, y Polonia, Mateusz Morawieck, enviara una carta al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, advirtiendo una "profunda preocupación" de un número de temas relativos al Mercosur y la "sensibilidad de los productos agrícolas".

Macron redobló la apuesta desde Japón al advertir que su país no permitirá la puesta en marcha del tratado birregional (que debe ser refrendado en los parlamentos de cada país) si acaso Brasil abandona el Acuerdo de París para la reducción de los gases de efecto invernadero, como ha blandido Jaír Bolsonaro.

"Esto es por una simple razón: estamos pidiendo a nuestros agricultores que dejen de usar agrotóxicos, estamos pidiendo a nuestras empresas que produzcan con menos uso de carbono -explicó Macron- y no podemos permitir de buenas a primeras que ingreses productos de países que no respetan esas normas".

Funcionarios europeos dijeron a este diario que "las negociaciones están avanzando" y que "de ambos lados están intentando tender un puente en los temas remanentes para lograr un cierre satisfactorio", aunque para los europeos "hay demandas clave" por tratar.

En la delegación argentina fueron más precavidos y simplemente admitieron "la expectativa es positiva", si bien hay "mucho ida y vuelta".

El Gobierno tenía la expectativa de anunciar al márgen del G20, en Japón, el cierre de las negociaciones entre bloques, estando allí presentes el presidente Macri y su par de Brasil, Jaír Bolsonaro, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, y el titular de la comisión, Juncker. Además, participan del G20 los presidentes de Francia, Macron; España, Pedro Sánchez; la canciller alemana Ángela Merkel y el primer ministor italiano Guiseppe Conte.

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