DE TODAS MANERAS, EL PROYECTO, CLAVE PARA EL GOBIERNO, VOLVER A AL SENADO

El oficialismo intentará sostener cambios acordados a PPP para poder aprobarlo

Luego del traspié del miércoles, buscará hacer valer el acuerdo previo para votar el proyecto de contratos público privados el martes 1 en comisiones y el 2 en el recinto

Mientras intenta recuperarse de la sorpresiva derrota que tuvo este miércoles en el recinto, el oficialismo rediseña su estrategia con el objetivo de aprobar la regulación de los contratos público privados la semana próxima. Según el esquema que manejaba ayer el presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, la iniciativa será nuevamente debatida en comisiones el martes y en el recinto el miércoles, junto al Presupuesto.


En principio, la intención de Cambiemos es mantener el proyecto tal como había quedado después de acordar numerosas modificaciones con el Frente Renovador y el bloque Justicialista. En ese texto, que por impulso del PJ-Frente para la Victoria fue devuelto a comisiones, el oficialismo había aceptado reforzar el incentivo para que las obras que se desarrollen bajo la ley fomenten la participación de pymes y de mano de obra nacional.
También, que para el año próximo quede establecido un tope del 5% del Presupuesto 2017 para utilizar en proyectos de participación público privada y que en los años siguientes esas partidas deberán precisarse en la Ley de Presupuesto. Para el seguimiento de esos fondos, se agregó la creación de una comisión bicameral de control.


Además, entre otros puntos, se incluyó la participación de universidades nacionales en las instancias técnicas de resolución de conflictos, y se estableció que el riesgo de los emprendimientos debe procurar ser repartido en forma equitativa entre el Estado y los privados. Para el kirchnerismo y parte del massismo, estas modificaciones resultan insuficientes. Aun así, el oficialismo apuesta a que el FR termine honrando el compromiso que había asumido al acordar los cambios, y apoye el proyecto.


En la última sesión, el PJ-FpV pidió devolver el proyecto a comisión en virtud de la multiplicidad de cambios que iba a sufrir y el FR apoyó esa moción, venciendo a Cambiemos y al bloque Justicialista.
Pasado el sacudón, Cambiemos evaluó que ese escenario fue el mal menor, ante la posibilidad de que esa misma mayoría podría haber logrado hacer caer la iniciativa. En ese contexto, en la primera línea del oficialismo parlamentario responsabilizan más a Elisa Carrió que a Sergio Massa por la demora que sufrió el texto.


Según un avezado diputado macrista, el clima en la Cámara comenzó a "enrarecerse" el lunes, cuando la chaqueña anunció públicamente su disidencia con el proyecto de reforma del Ministerio Público Fiscal. "Ahí nosotros perdemos autoridad. Porque los bloques del peronismo que nos iban a acompañar nos recriminan que iban a hacer un esfuerzo para votar nuestro proyecto y resulta que nuestra propia tropa les sale a pegar y los acusa de un pacto. Y tienen razón", se quejó.


El mismo legislador considera que lo único reprochable del FR en esa sesión fue que rompió el acuerdo sin avisar. "Eso no cayó bien en el bloque", admite. Pero, de todas formas, destaca que Cambiemos deberá ahora "recuperar la confianza" de sus habituales aliados. Y para eso, recomponer el vínculo con Massa quien ayer se reunió con María Eugenia Vidal a conversar sobre el Presupuesto bonaerense.

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