El Gobierno prepara su "New Deal" y un plan keynesiano para la pospandemia
La obra pública será clave en el "día después" pero el Presidente también reclama un nuevo contrato con un "capitalismo más noble". Kicillof también ultima un ambicioso "Plan Quinquenal" de infraestructura.
En 2003, cuando pocos en el país lo conocían, con la excepción de Santa Cruz, Néstor Kirchner se presentaba como "neokeynesiano". La analogía temporal era obvia: la crisis de 2001 fue nuestra Gran Depresión. La pospandemia parece ahora aún más cercana a Franklin D. Roosevelt. Por eso, como testigo y protagonista de primera mano, Alberto Fernández piensa en su propio "New Deal" para la Argentina del día después del coronavirus.
Antes del Covid-19 , citando al Papa Francisco, el Presidente ya predicaba por una reformulación del sistema financiero. La pandemia, cree, terminó dándole la razón. Hoy, pidió un capitalismo "más noble" por videoconferencia ante la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE). Como parte de sus "nuevos contratos", en el Gobierno apuestan a sistematizar a futuro el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) , que blanqueó la existencia de mucha más gente fuera del sistema de la que se calculaba.
Pero por lo que son recordados Roosevelt y el economista John Maynard Keynes es por la obra pública. La misma apuesta de Kirchner, la misma de Fernández. El Jefe de Estado lanzó ayer la siguiente etapa del "Argentina Hace" que ideó el ministro del área Gabriel Katopodis. Después de una primera tanda de casi $ 10.000 millones para 40 municipios bonaerenses, ahora se anunciaron $ 2270 millones para este año para provincias del sur.
"Nosotros ya estamos pensando en cómo va a ser el día después porque Argentina tiene un horizonte y sabemos cuál es ese horizonte que tenemos que alcanzar", expresó Fernández en la Quinta de Olivos. Y para que no quedaran dudas, añadió: "El país tiene que volver a ponerse de pie inmediatamente después de que la pandemia termine, y este plan es eso".
La etapa anunciada ayer incluye a 19 localidades de Neuquén (que recibirá en total $ 490 millones); Chubut ($ 460 millones); Río Negro ($ 400 millones); Santa Cruz ($ 370 millones); Tierra del Fuego ($ 340 millones); y La Pampa ($ 210 millones). "Que la obra pública sea palanca para la reconstrucción de la Argentina, y para empezar a mover la rueda de la economía", auguró Katopodis.
Por su parte, Axel Kicillof está preparando su propio programa con la misma lógica: desde que asumió, antes de que el coronavirus fuera noticia, lo llama "Plan Quinquenal", una alegoría más peronista. En el ministerio de Infraestructura de Agustín Simone, según adelantaron, están listando con los 135 intendentes las obras que se presentarán. Calculan una inversión, hoy, de $ 650.000 millones para ejecutar a cuatro años.
Las obras planeadas se dividen en dos grandes grupos: una por necesidad de infraestructura poblacional (hábitat, agua y cloacas, y vialidad, por ejemplo) y por potencial productivo. En carpeta, en el corto plazo, está previsto reactivar trabajos en proyectos que ya cuentan con financiación, como la Ruta 11. "Hay un consenso político que para salir de la pandemia, la economía necesita de un gran plan de obra pública", argumentan en la administración kicillofista.