El Gobierno pesifica la energía eléctrica y ahorra u$s 318 millones en subsidios a generadoras

El Ministerio de Desarrollo Productivo aprovechará que hay centrales térmicas e hidroeléctricas sin contrato para reducir un 24% la remuneración fija por potencia y pesificarles esos ingresos a generadoras eléctricas

El Gobierno está al borde de tomar una de las primeras decisiones fuertes en el área energética, que marcará su relación con multinacionales y empresarios poderosos del país.

El Ministerio de Desarrollo Productivo y la Secretaría de Energía reducirán la remuneración a las generadoras eléctricas para ahorrar unos u$s 318 millones en el año y restarán una importante masa de ingresos a las empresas del sector.

En la misma resolución que el ministro Matías Kulfas y el secretario de Energía, Sergio Lanziani, firmarán entre hoy y mañana se pesificará una parte de la generación de energía eléctrica (una promesa de campaña del presidente, Alberto Fernández), con efectos retroactivos al 1° de febrero. La medida se publicará esta semana en el Boletín Oficial.

Con esto, quitará ingresos por hasta 30% a empresas como la italiana Enel (controlante de la distribuidora Edesur), la estadounidense AES, y las locales Pampa Energía (en manos de Marcelo Mindlin) y Central Puerto (cuyos accionistas son Carlos Miguens, Eduardo Escasany y Nicolás Caputo, entre otros).

En línea con lo que contó El Cronista el lunes 17, el Gobierno bajará un 24% la remuneración fija de centrales térmicas y represas hidroeléctricas sin contrato, que están recibiendo ingresos con precio "spot" fijado por la Resolución 1/2019

Tal como contó El Cronista el pasado 9 de diciembre, el nuevo Gobierno puede desdolarizar la mitad del sistema eléctrico.

Es que el costo del Sistema Argentino de Interconexión (SADI) alcanzó en 2019 los u$s 8592 millones para tener potencia por 38.561 MW (hasta noviembre).

De ellos, hay 26.020 MW (el 67%) entre centrales térmicas e hidroeléctricas sin contrato, recibiendo ingresos por la Resolución 1/2019 por u$s 3823 millones (44% del total), de los cuales u$s 1344 millones es remuneración fija por potencia disponible.

Sobre estos últimos es el ajuste que aplicará el Tesoro, en la búsqueda de quedarse con u$s 318 millones y pagar en total u$s 1026 millones en ese ítem durante 2020

Las centrales termoeléctricas como Central Costanera, Dock Sud y otras perciben un promedio de u$s 68 por megavatio-hora (MWh), mientras que las hidroeléctricas binacionales como Yacyretá, Salto Grande y las locales Piedra del Águila y El Chocón, por ejemplo, reciben en promedio unos u$s 19 / MWh.

La reducción sería de 16% para las térmicas y de 45% para las hidráulicas, según confió a este diario el director de generación de una de las principales compañías del sector.

Fuentes oficiales agregaron que las hidroeléctricas binacionales (Yacyretá con Paraguay y Salto Grande con Uruguay) mantendrán intactos sus ingresos, pero se les pesificarán.

En tanto, habría una compensación en el precio de la energía (remuneración variable) durante seis meses al año para los ciclos combinados más eficientes que ayudan a cubrir las demandas de punta en invierno y en verano.

Los valores en pesos se ajustarán regularmente de acuerdo a un mix entre los índices de inflación mayorista (IPIM) y minorista (IPC).

La movida oficial tiene como objetivo cuidar la caja en una situación delicada: el 50% del costo de generación eléctrica está subsidiado y a medida que aumente el dólar (contenido ahora por el cepo cambiario) subirán las erogaciones del Estado nacional.

De esta manera, el costo monómico caerá aproximadamente de u$s 69 a 60 o 62 por MWh, informaron fuentes oficiales.

El segmento de la generación de energía tiene un impacto del orden del 50% en la factura de electricidad que llega a los hogares, afirmaron en el Gobierno.

"Entre 2015 y 2018 esa remuneración aumentó un 60%, a partir de una decisión del gobierno de Mauricio Macri", completaron en las cercanías de Casa Rosada.

Las tarifas eléctricas están congeladas desde marzo del año pasado y seguirán así al menos hasta julio, en un contexto en el que el Gobierno ve inviable ajustar estos precios relativos mientras pide un esfuerzo a empresas y trabajadores para desindexar la economía.

La iniciativa no es original. Ya con la crisis desatada y con serias restricciones fiscales, el último secretario de Energía del macrismo, Gustavo Lopetegui, bajó mediante la Resolución 1/2019 en marzo un 15% los ingresos a estas centrales que se relacionan con el mercado spot.

"Se vuelve a impactar sobre la remuneración de las generadoras, lo que pone en riesgo la disponibilidad, y sigue sin aplicarse ninguna reducción a la carga impositiva que tanto peso tiene. En lugar de resolver la macroeconomía se interviene en la regulación energética. Es otra mala señal para quienes quieren invertir y ha quedado demostrado que, aún con tarifas congeladas, la inflación siguió aumentando mes a mes", cuestionaron en una empresa afectada.

"Creemos que puede ser un recorte muy importante, que el Gobierno lo venía anunciando desde antes de asumir. Esto es fácil de ajustar porque es un precio spot, sin contrato", analizaron en el área de Regulación de una generadora.

Pese a que hay un enorme malestar en el sector, fuentes consultadas por este medio también entendieron que "el Estado no puede subsidiar más a la demanda" y que "es mejor esta medida a que se siga desordenando la cadena de pagos".

Como contó este diario, la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrica (Cammesa) tiene atrasos en los pagos a las generadoras (les debe diciembre).

La sociedad mixta está pagando fuera de término -la semana pasada debió liquidar diciembre- porque el Tesoro está retaceando fondos y porque las distribuidoras provinciales acumulan multimillonarias deudas -más de $ 50.000 millones al 12 de febrero-.

Temas relacionados
Más noticias de Energía

Las más leídas de Economía y Política

Destacadas de hoy

Noticias de tu interés