Dujovne va al Congreso por el Presupuesto: "cuatro ejes" oficiales y temas sensibles

Los lineamentos macro sobre dólar, crecimiento e inflación, además del ajuste pactado con el FMI y negociado con las provincias estarán entre los puntos más espinosos del debate que comienza mañana en comisión.

El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, presentará mañana en el Congreso el Presupuesto 2019. Lo hará a pocos días de la foto que el presidente Mauricio Macri logró con los gobernadores, que dieron un visto bueno general al proyecto que prevé una fuerte reducción del déficit primario, una de las exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI) para adelantar en 2019, en un resideño de lo ya acordado,  los fondos comprometidos para los años 2020 y 2021.

Dujovne hablará ante los diputados de la Comisión de Presupuesto a partir de las 12.30 en el salón Delia Parodi de la Cámara baja, donde explicará los lineamientos generales del proyecto enviado por el Poder Ejecutivo Nacional.

En tanto, el jueves el ministro volverá a la misma comisión que encabeza Luciano Laspina (PRO) para dar detalles más específicos del proyecto y responder preguntas de los legisladores.

Ejes

Estos son los "cuatro ejes" que, según fuentes de Economía, mejor describen y sintetizan lo que Dujovne explicará mañana:

1. UN PRESUPUESTO EN EQUILIBRIO

Con el objetivo de equilibrar las cuentas públicas, trás 10 años consecutivos de déficit fiscal, el Estado Nacional pasará del  2.6% de déficit primario en 2018, al 0% en 2019, con un esfuerzo  prácticamente en partes iguales entre ingresos y gastos. Además, es gobierno nacional hizo un fuerte esfuerzo fiscal con la rebaja de los gastos de la política, el achicamiento de los ministerios, y eliminación de las estructuras en febrero de este año. 

2. UN PRESUPUESTO FOCALIZADO EN LOS SECTORES MÁS VULNERABLES

La inversión social aumentará 32% y la seguridad social 35%. Además, el gasto en salud crecerá 29%, donde la inversión en remedios y vacunas alcanzará casi un 95%.

También aumentará la asistencia social 29%, donde los programas de alimentos crecen un 60%.

3. OBRAS EMPEZADAS, OBRAS FINALIZADAS

Para el 2019 el gobierno prevé una inversión de 160 MM para su plan de infraestructura Nacional, que permitirá terminar las obras que se encuentran en ejecución (rutas, autopistas, aeropuertos, escuelas, hospitales, cloacas, agua potable, urbanizaciones integrales y viviendas, entre otras áreas).

4. SERVICIOS PÚBLICOS NO AUMENTARÁN MÁS QUE LA INFLACIÓN

En el presupuesto Nacional 2019, los aumentos en las las tarifas de los servicios públicos no crecerán por encima de la inflación.

 

Temas sensibles, temas en debate

El miércoles pasado el presidente Mauricio Macri recibió a los gobernadores para cerrar las negociaciones por el Presupuesto 2019, mientras avanzó en el diálogo con los distintos bloques para "agilizar" el tratamiento en el Parlamento.

 El encuentro se llevó a cabo en el Salón Eva Perón y contó con la presencia de representantes de 22 de las 24 provincias: los únicos distritos ausentes fueron San Luis y La Pampa.

 "De parte de los gobernadores encontramos un acompañamiento a la necesidad de que el Presidente cuente con un Presupuesto y también el convencimiento de que tiene que ser con equilibrio entre ingresos y gastos", sostuvo el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, en ese momento.

 Aunque Dujovne evitó dar precisiones sobre los indicadores macroeconómicos previstos para 2019, trascendió, en base a un borrador que circuló entre los gobernadores, que se estima una inflación de 25 por ciento, un dólar de 42 pesos y crecimiento 0 por ciento, tras la recesión del 2,5 de este año.

En ese sentido, el titular del Palacio de Hacienda sí señaló que son números "conservadores", particularmente "en términos del crecimiento para el año próximo, puesto que se va a finalizar este año con un crecimiento negativo de la economía que va a dejar un fuerte arrastre negativo para el año próximo".

Esos números despertaron suspicacias. Una inflación del 25 para 2019, cuando se espera que la del 2018 supere el 40, supone una reducción del 40% en el aumento de los precios de un año a otro. Esto en un contexto en el que el ajuste que se discute con el FMI supone la necesidad, entre otras cosas, de reducir subsidios a las tarifas de los servicios y la consecuente corrección tarifaria, luce complicado.  Por otro lado, un tipo de cambio de 42 pesos para el año entrante, cuando el dólar ya superó los 40 esta semana, no será fácil de digerir.

La gran apuesta del Gobierno, sin embargo, es un achique en las partidas de unos 400.000 pesos, un cuarto del cual debería recaer sobre las espaldas de las provincias. Así, los gobernadores se disponen a aceptar la eliminación del fondo sojero que iba a las provincias, una medida que el Gobierno dispuso por decreto, en coincidencia con el reestablecimiento de las retenciones a las exportaciones, no solo las del campo. Con ese decreto, para el cual el oficialismo logró ya un avance dentro del Parlamento al conseguir dictamen en la bicameral que controla los DNU, lo recaudado por ese tributo irá a parar al Estado nacional.   

Luego de algunas refriegas, los mandatarios adelantaron hace 15 días que consentirían ese punto, pero en cada distrito donde se adelantó que había acuerdo, surgieron intendentes que pusieron el grito en el cielo. 

Se plantea, a su vez, que las provincias se hagan cargo de los subsidios al transporte y de la eliminación de las tarifas sociales. 

El Fondo Federal Solidario fue creado por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner al calor de la discusión política por la implementación de retenciones móviles a las exportaciones de soja. Estaba hasta ahora conformado por el 30% de lo recaudado por ese impuesto y era distribuido automáticamente entre provincias y municipios, que debían derivarlo a obras de infraestructura vial e hídrica. 

Aunque la foto con los gobernadores pretendió mostrar que hay una parte del camino allanado, la negociación parlamentaria para su aprobación tendrá no pocos escollos, más determinados por la inestabilidad económica general y la fragilidad política resultante que por una oposición estratégica al contenido del Presupuesto.

Los gobernadores, en tanto, son la llave para el Senado y, en parte, para Diputados, pero no expresan la totalidad del mozaico parlamentario. En ese sentido, el gobernador salteño, Juan Manuel Urtubey, pidió dejar “muy en claro que el debate final se dará en el ámbito del Congreso. “Lo que los gobernadores hemos planteado es el marco de consenso político en términos de realizar todos los esfuerzos para un presupuesto equilibrado y que sea lo que permita que el Poder Ejecutivo pueda funcionar , aclaró.

“Nosotros estamos confiados en el Presupuesto, sabemos que tiene que ser aprobado por el Congreso, pero fue acordado políticamente con todos los gobernadores , dijeron a El Cronista desde Economía. 

Uno de los puntos conflictivos con los jefes provinciales, parcialmente saldado, fue el pedido de los mandatarios que, para compensar el ajuste, solicitaron retrasar el plan de reducción gradual de ingresos brutos. Lo que trascendió la semana  pasada es que el Gobierno mostraba más disposición para atrasar la rebaja de Sellos, antes que ingresos brutos, cuya disminución fue uno de los aspectos medulares del pacto fiscal. La posibilidad de aplazar la rebaja de ingresos brutos fue objetada, además, por el sector empresario.

Más macro

Cualquiera sea su consistencia y traducción en el Congreso, el debate con los gobernadores estuvo circunscripto a un aspecto que no agota el problema de los fundamentos que sostienen el plan del Gobierno.

La discusión está naturalmente centrada en cómo reducir gastos y, mas recientemente, cómo aumentar ingresos que conduzcan al equilibrio presupuestario, o déficit cero, pero a nivel primario, es decir sin contar el pago de intereses de la deuda. Pero, si se toma lo transcurrido de 2018,  el llamado déficit primario equivale  sólo a un 20% de los fondos utilizados para hacer frente al pago de intereses de la deuda, un tema que preocupa a economistas, incluso cercanos al Gobierno, o que al menos no están en sus antípodas, que critican que el Ejecutivo se centre exclusivamente en rojo primario. La devaluación no ha hecho otra cosa que agravar este problema, ya que los compromisos externos están básicamente nominados en dolares u otras divisas, lo que hace más cuesta arriba su cancelación, incluso y por el mismo motivo, en su relación con el PBI.

 


 

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