DURANTE EL FIN DE SEMANA LOS EJECUTIVOS RECIBIERON LLAMADOS

Cabrera va a la UIA a pedir un gesto para mantener empleos y empresarios anticipan enojos

Los hombres de negocios están desorientados por el compromiso que le pidió el Gobierno para que no despidan trabajadores por 90 días

"No se entiende cómo funcionarios que creíamos que entendían cómo funcionaban las gremiales empresarias nos pidan esto, que es imposible y que además no resuelve un tema que es político", bufaba ayer el titular de una importante cámara.
Los llamados de diversos funcionarios que recibieron los presidentes de todas las entidades empresarias desde el viernes y durante todo el fin de semana sorprendieron y molestaron a más de uno. Ante la inminente aprobación de la ley antidespidos, el Gobierno busca un compromiso por parte del sector privado de que no despedirán trabajadores al menos durante los próximos 90 días. En estos términos se lo plantearon los vicejefes de Gabinete, Gustavo Lopetegui y Mario Quintana, y el ministro de Producción, Francisco Cabrera, a los titulares de la UIA, Adrián Kaufmann; de CAME, Osvaldo Cornide; de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luis Miguel Etchebehere; y de otras cámaras pymes. También se habían comunicado con el director de IDEA y coordinador del Foro de Convergencia, Miguel Blanco, en los últimos días. Con la Cámara de Comercio (CAC) no habían hablado hasta ayer.
Cabrera irá a la reunión de junta directiva de la UIA mañana y si bien el planteo inicial cuando se organizó el encuentro era hablar sobre los lineamientos sobre los que está trabajando el Gobierno y posiblemente hacer un anuncio, según dijeron fuentes de la entidad, ahora el foco será el empleo. Desde la cartera productiva afirmaron que el ministro irá a la central industrial a buscar un gesto de los industriales en materia laboral y que si bien es cierto que están trabajando activamente en un plan para beneficiar a las pymes, "aún no está cerrado", por lo que "difícilmente se les adelante algo".
En declaraciones radiales el fin de semana, Cabrera fue tajante. Admitió estar enojado con algunos empresarios por los aumentos de precios y confirmó que se les pidió un "compromiso público y por escrito" de que durante dos o tres meses no van a despedir personal. "Las decisiones de los empresarios no tienen que ser declamativas. Hay tres cosas que son definitivas: precios, inversión y empleo. Decisiones concretas y compromisos públicos nunca se tomaron. El empresario, aún cuando no quiera, debe tomar ese compromiso público", sentenció Cabrera, al tiempo que reconoció que "el sindicalismo, que tiene la fama de ser uno de los problemas del sistema productivo, fue muchísimo más maduro y responsable".
El pedido concreto del Gobierno a los empresarios fue que logren el compromiso de unas 2000 empresas por cámara para que, con nombre y apellido, aseguren que no despedirán trabajadores. "Es imposible conseguir eso. Nosotros ya nos expresamos públicamente en contra del proyecto de ley antidespidos, pero no podemos pedirle a 2000 empresas que firmen un compromiso de esa naturaleza porque representamos a muchísimas compañías", sostuvo un dirigente de la UIA, quien agregó: "Si Cabrera viene mañana a pedir esto, le van a saltar todos a plantearle que no se puede pedir eso". Los industriales coinciden en que el Gobierno debe tomar medidas para favorecer la creación de empleo, más que buscar compromisos incumplibles.
Desde el Gobierno buscan, de ese modo, lograr el acompañamiento empresario en favor de mantener el empleo, aunque saben perfectamente que no podrán con eso frenar la ley. "Es un tema político y quieren echarnos la culpa a nosotros", dijo otro referente empresario.

Las más leídas de Economía y Política

Destacadas de hoy

Noticias de tu interés