Alimenticias cuestionan acuerdo de precios y quieren reunirse con Moreno

Molestos por no haber sido consultados por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, para la firma del acuerdo de precios sellado con los supermercados, los industriales de la alimentación agrupados en la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (COPAL) fijarán hoy posición al respecto, en el primer encuentro del Comité Ejecutivo luego del receso vacacional. Según diversas fuentes de la entidad, habrá un cuestionamiento a la medida oficial y se evaluará solicitar un encuentro de urgencia con las autoridades.

El principal temor es que este acuerdo, que abarca a todos los productos que comercializan las cadenas, supermercados chinos, almacenes y locales de electrodomésticos, se extienda más allá de los dos meses fijados en el convenio. El presidente de la Copal, Daniel Funes de Rioja, consideró que el congelamiento es un acuerdo entre los supermercados, por lo que hay que ver cómo se manejarán con sus proveedores.

Tenemos que ver qué tipo de productos y qué tipo de acuerdo hacen con las empresas productoras, enfatizó el dirigente.

Desde el supermercadismo consideraron que no veían problemático el escenario con los proveedores debido a que no había por delante autorizaciones de precios por parte de Comercio Interior. Pero fuentes de Copal admitieron que permanentemente Moreno está autorizando nuevas listas de precios, ya que hay insumos que aumentan y que impactan directamente en la producción.

A ello se sumarán las paritarias, que generarán un fuerte impacto en el sector y no será posible absorberla sin trasladarla a los precios, señalaron fuentes de la cámara. La negociación salarial de la alimentación debe comenzar a fines de abril, por lo que el impacto comenzaría a sentirse recién con los sueldos de mayo. Si el acuerdo de precios finaliza el 1º de abril, como está previsto, no habría inconvenientes, pero la sospecha es que se trata de una estrategia que el Gobierno relanzó y que busca prorratear en el tiempo.

Uno de los ejes de discusión del encuentro de hoy de Copal será analizar si la medida se enmarca en un plan más amplio para controlar la inflación o se limitará a estos acuerdos de precios que demostraron infinidad de veces que no logran buenos resultados. Tiene que haber un plan coherente en el que participen todos los sectores, empresarios, sindicatos y Gobierno, manifestó un directivo de la entidad.

Por su parte, el director ejecutivo de la Cámara de Supermercados y Autoservicios Chinos (Casrech), Miguel Angel Calvete, consideró que no hay motivo para que aumenten los precios de los alimentos porque la Argentina es productor y exportador de materia prima. De todos modos, el directivo insistió en que el acuerdo debería extenderse a operadores de logística, distribuidores y mayoristas para garantizar el normal cumplimiento del convenio.

Entendemos que es una herramienta necesaria, pero hoy, con la coyuntura, es insuficiente, porque tiene que estar acompañado por otro tipo de herramientas y medidas que hagan sustentable este tipo de acuerdos para generar la confianza necesaria, subrayó el ejecutivo.

El Gobierno dio vastas muestras en lo que va del año de que uno de los objetivos del 2013 será trabajar para contener la suba de costos. Pero no lo hará con política macroeconómica, que implicaría ajuste fiscal y monetario, sino que intentará, una vez más, negociar con los distintos sectores acuerdos de precios que duran hasta que los controles comienzan a flexibilizarse. En tanto, los legisladores darán a conocer hoy la inflación de enero surge del promedio de las estimaciones de las consultoras privadas y rondaría el 2,5%.