Bolivia anunció que habrá menos gas para la Argentina

Bolivia planteará a la Argentina la renegociación de los volúmenes de gas, que deben comenzar a incrementarse gradualmente a partir de 2010 y que por el momento no puede atender por un estancamiento en su producción.

Así lo anticipó hoy el vicepresidente de ese país, Alvaro García: "Hay que renegociar el traslado del cumplimiento total del abastecimiento a la Argentina del 2011; quizá al 2012 o mediados del 2013, hay que variar un año, o año y medio, las fechas y los topes", declaró, en diálogo con la radio católica, Fides.

El funcionario aseguró que el contrato deberá prorrogarse porque las inversiones de las empresas petroleras transnacionales que operan en Bolivia recién comenzarán a dar frutos plenos a partir del 2009 y 2010.

La producción de gas natural para la exportación y el consumo interno se mantuvo parcialmente estancada desde mayo de 2006, cuando se nacionalizaron los hidrocarburos, y hasta fines del año pasado.

En octubre de 2006, el presidente de Bolivia, Evo Morales, y su par Néstor Kirchner, firmaron un acuerdo de compra y venta de gas natural por 20 años, con volúmenes gradualmente reajustados.

Ese acuerdo establecía que Bolivia debía subir sus volúmenes enviados por un antiguo ducto binacional hasta los 7,7 millones de metros cúbicos diarios (MMCD) de gas, a partir de 2010, y comenzar a suministrar 16 MMCD desde 2011, una vez que esté concluido el nuevo Gasoducto Nordeste Argentino, para llegar a un tope de 27,7 MMCD.

Actualmente, Argentina se encuentra en fase de licitación y adjudicación del nuevo ducto de unos 1.500 km de extensión, que pasará por las provincias de Salta, Formosa, Chaco, Misiones, Corrientes y Entre Ríos.

La nueva posición del gobierno boliviano surge tras la reunión que mantuvieron el fin de semana, en Buenos Aires, los presidentes Luiz Inacio Lula da Silva (Brasil), Morales (Bolivia) y Cristina Kirchner (Argentina).

Bolivia es el segundo productor de gas de América del Sur. Suministra alrededor de 30 millones metros cúbicos diarios del energético a Brasil; y cerca de 3,5 millones, a la Argentina.