Vaca Muerta: petroleras lamentan distorsiones en mercado de gas

En un encuentro en la Embajada de Brasil, algunos ejecutivos se quejaron de la distorsión de los precios por debajo de umbrales de rentabilidad.

A poco de andar, los resultados de Vaca Muerta permitieron que la producción nacional de gas tuviera sus mejores resultados desde 2010. Sin embargo, la disminución en los precios de comercialización del gas motorizó una batalla interna entre las petroleras, cuyos ejecutivos ahora lamentan las señales de precios que entrega el Gobierno.

Este jueves, funcionarios y ejecutivos de primera línea de las empresas se congregaron en la Embajada de Brasil, en donde se debatió sobre el Presal, Vaca Muerta y "la nueva realidad energética de Brasil y Argentina".

En diálogo con El Cronista, dos importantes fuentes de las petroleras se quejaron de la situación en la que se encuentra hoy el mercado de gas, en donde se consiguieron en los últimos días precios spot en torno a los u$s 3 por millón de BTU (/MMBTU).

Éste es un valor muy cercano al break even de algunos yacimientos, lo que pone en duda la rentabilidad de proyectos a largo plazo en Vaca Muerta.

"La Resolución 46/2017 generó una distorsión fiscal y de mercado", disparó uno de los principales productores de gas de la Argentina.

Su reclamo, junto al de otras grandes petroleras, fue fundamental para modificar la forma en que el Estado liquida los subsidios al shale gas, que afectó principalmente a Tecpetrol, pero también a YPF, Pan American Energy, Total Austral y Wintershall, en menor medida.

En la misma línea, un ejecutivo de otra petrolera, que también participó de los paneles, se quejó de que la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) impuso un tope a los precios de la subasta que se realizará la semana que viene a través del Mercado Electrónico del Gas (Megsa).

Los valores que funcionarán como límite para los 5,6 millones de metros cúbicos por día (MMm3/d) que como máximo podrán ofrecer las petroleras que operan en Tierra del Fuego serán de u$s 3,24 /MMBTU entre junio y agosto y de u$s 2,20 /MMBTU para el resto del año.

Estos precios en boca de pozo o en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST) resultan poco atractivos para las empresas, pero el Gobierno apuesta a que Cammesa oficie de comprador seguro del producto, antes de que las compañías deban cerrar la inyección de gas por falta de demanda.

"Las señales de precios, otra vez, no son las correctas", dijeron a este diario en una de las firmas.

Una de las paradojas que deparó este escenario es que YPF, la principal oferente de gas del país, redujo en un 20,6% interanual su producción de gas natural en el primer trimestre de este año, al tiempo que el total de la extracción nacional creció un 5%.

Según declaró a la Bolsa de Valores, la petrolera estatal tuvo que cerrar inyección por unos 9 MMm3/d de pozos convencionales, lo que la llevó a descender su producción de 43,7 MMm3/d a 34,7 MMm3/d. Esa fue una de las razones por las que entre enero y marzo de 2019 tuvo pérdidas por $ 8153 millones.

El precio promedio del gas cayó un 20%, de u$s 4,65 a u$s 3,72 /MMBTU.

La cuota de mercado de YPF se la ganó Tecpetrol y el ingreso de centrales de energía renovable, que tienen prioridad de despacho al sistema eléctrico.

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