

Después de un par de intentos fallidos, el martes pasado el senado bonaerense le dio media sanción al proyecto que repone las reelecciones para cargos legislativos y deliberativos locales, pero el resto del trámite en la cámara de Diputados tendrá sus propios vericuetos y hay quienes ya sacan cuentas para saber cuánto falta para su aprobación.
"Lo que hicieron los senadores fue sorpresivo", reconocen en Diputados. Primero, el bloque del oficialismo consiguió la presencia de legisladores opositores para conseguir un quorum esquivo y luego, con el concurso de un radical y dos "libertarios", empatar la votación y dejar la aprobación servida al sufragio de la vicegobernadora Verónica Magario.
Según dejaron trascender los opositores que aportaron al quorum, lo hicieron para que se pudieran debatir más de 90 pliegos judiciales que corrían el riesgo de ser retirados, pero lo cierto es que, como contrapartida, le ofrendaron esa victoria al bloque peronista.
No exento de polémica, el proyecto que consiguió media sanción propone que los legisladores provinciales, los concejales y los concejeros escolares puedan ser reelectos sin límite, tal como sucede con quienes son electos para el Congreso Nacional. Quedó fuera del debate la alternativa que, además, incluía a los intendentes municipales.
Si el trámite en el Senado fue difícil, lo que suceda en la Cámara baja es, para muchos, un resultado cantado que se desprende de una sola pregunta: ¿Quién conseguirá los 47 votos para darle sanción a la iniciativa?
En principio, no se tratará esta semana, según confirmaron fuentes parlamentarias a El Cronista.
El oficialismo que llegó la media sanción enfrenta, en Diputados, un triple desafío. En principio, desde el sector que responde al gobernador Axel Kicillof se sostiene que no es una iniciativa que les es propia y señalan, casi apesadumbrados, que hubieran preferido que se trataran otros temas en el Senado, tal como el "endeudamiento" provincial. Por detrás de esa afirmación se esconde un grupo que presiona y quiere las reelecciones, pero también para los intendentes.
Por otra parte, la única senadora del Frente Renovador votó en contra de la iniciativa el martes pasado. El espacio que conduce Sergio Massa se opone a las reelecciones y si eso se trasladara a diputados, supondría que 11 votos no fueran positivos.
Así las cosas, de conseguir que el resto de los oficialistas voten por el sí, habría tan sólo 22 manos para levantar, muy lejos de las 47 para dar quórum y aprobarlo.
¿Quién quiere defender las reelecciones?
El Frente de Izquierda, la Coalición Cívica, Acuerdo Cívico, el radicalismo y La Libertad Avanza ya adelantaron que no acompañarían en el recinto. Pero muchos integrantes de esas bancadas podrían quedarse fuera de la cámara en diciembre próximo y algunos creen que se los podría tentar.
El proyecto, por otra parte, favorece a quienes pretenden la reelección de los cargos legislativos pero que prefieren la renovación de los "ejecutivos" para poder disputar ese poder. "Quienes están interesados son los de La Cámpora, que podrían así disputar en 2027 muchas intendencias que tienen jefes "históricos" del justicialismo", resumió un vocero del peronismo en diálogo con El Cronista.
Mientras tanto, en el Movimiento Derecho al Futuro, que congrega a casi 50 titulares de Ejecutivos municipales, se había presionado para que se tratara un proyecto alternativo que permitía la reelección de ese tipo de cargos.
Todos coinciden que, por estas horas, será difícil conseguir tratar la iniciativa tal y como está. Después de las elecciones de septiembre se podrá saber si queda margen para avanzar o todo queda sepultado en un cajón.


