En Neuquén cerca de 1.300 personas fueron evacuadas

en las últimas horas por el fuerte temporal de lluvia y viento que golpea gran parte del país, según fuentes oficiales. Como consecuencia de esto, el Gobierno dispuso que el Ejército preste “ayuda humanitaria”.

El ministro de Defensa, Agustín Rossi, anunció que los efectivos ya están colaborando con la provincia sureña, mediante la coordinación de la Secretaría de Coordinación Militar de Asistencia en Emergencias, encabezada por Roberto Corti.

Los edificios públicos, juzgados y escuelas permanecen cerrados hoy en toda la provincia. Esta es la peor tormenta en 40 años, informó el ministro de Coordinación de Gabinete, Seguridad y Trabajo neuquino, Gabriel Gastaminza.

En todo el país los damnificados y evacuados llegan a 2.000.

En las provincias norteñas de Catamarca y Santiago del Estero unas 500 personas fueron evacuadas por las fuertes precipitaciones, que provocaron inundaciones, desbordamiento de ríos y aludes.

Algunas poblaciones, como la catamarqueña Bañado de Ovanta, quedaron totalmente cubiertas por el agua.

Cerca de 400 habitantes de esa localidad tuvieron que ser evacuados después de que cayeran más de 200 milímetros en menos de dos horas y se desbordase el río Bañado de Ovanta, detalló el alcalde, Elpidio Guaraz.

En Santiago del Estero, casi cien personas fueron evacuadas en la turística localidad de Villa La Punta debido a un alud de barro y piedra.

El temporal también castigó la provincia central de Córdoba, donde unas 80 personas tuvieron que abandonar temporalmente sus hogares por la subida de las aguas.

El Servicio Meteorológico Nacional pronosticó indicó que el temporal continuará durante las próximas horas. También en Buenos Aires y su área metropolitana rige la alerta por fuertes lluvias y granizo.