Javier Milei se hizo presente por videoconferencia en el acto de cierre del congreso "Europa Viva 25" organizado por Vox en Madrid y pronunció un breve discurso -alrededor de cinco minutos- que casi no incluyó referencias a la situación política argentina. El Presidente centró su intervención en la estrategia del espacio de derecha en Europa y en la coyuntura internacional, con especial énfasis en el asesinato del activista conservador estadounidense Charlie Kirk, a quien definió como "mártir de la libertad".

El mandatario había cancelado su viaje a España tras la derrota electoral en la provincia de Buenos Aires y el estallido de un escándalo por presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad, pero igualmente eligió participar a distancia con un mensaje grabado desde la Casa Rosada. El tono del video fue monocorde y sosegado, salvo en el cierre, donde elevó la voz para entonar su consigna: "Viva Argentina, viva España, viva Vox, viva la libertad, carajo."

Milei abrió con un reconocimiento hacia los organizadores del encuentro y hacia Santiago Abascal, líder de Vox. "Muchas gracias por recibirme, aunque esta vez tenga que ser a la distancia. Gracias también a Vox, a Petrios y a mi gran amigo Santiago Abascal, quien siempre me recibió aún cuando todos me daban la espalda", afirmó.

Acto seguido, el presidente dedicó su intervención a la memoria de Charlie Kirk. "Quiero dedicar esta alocución y brindarle mis condolencias a la familia del mártir de la libertad, el queridísimo Charlie Kirch", expresó. Según su relato, "Charlie fue brutalmente asesinado a sangre fría por un intolerante, un simpatizante de la organización terrorista Antifa".

Milei sostuvo que el crimen era un reflejo del carácter de sus adversarios ideológicos. "Este hecho solo fue una prueba gráfica más de lo que es verdaderamente la izquierda en su estado puro: odio y resentimiento", planteó. Y remarcó: "Nos quitaron un guerrero ejemplar en el campo de la batalla de las ideas. Paradójicamente, este atentado fue perpetrado y celebrado por los mismos que nos acusan de violentos a nosotros, que lo único que hacemos es expresar con vehemencia la veracidad de nuestros argumentos."

El mandatario describió a Kirk como "una persona intachablemente pacífica" y lo definió como un referente que supo "confrontar mediante el debate público las mentiras de los socialistas desarticulándolas hasta en el más mínimo de los detalles". En esa línea, aseguró que su asesinato debía ser tomado como un llamado a la perseverancia: "Este trágico asesinato no debe ser un motivo para claudicar en la batalla cultural. Porque las personas que servimos a la causa noble y justa de la libertad de nuestras naciones solo somos meros instrumentos que contribuirán a hacerla posible."

En otro pasaje, Milei recordó los inicios de Kirk en la organización Turning Point USA, y estableció un paralelismo con su propia experiencia política: "Algo que inevitablemente me recuerda a mis inicios en Argentina, cuando éramos pocos quienes defendíamos las ideas de la libertad en los medios de comunicación. Algo por lo que seguramente también pasó Santiago Abascal en sus inicios o muchos de los referentes de este movimiento a nivel global."

La intervención incluyó también pasajes de tono religioso y apocalíptico. "Ellos son en todo momento y lugar un fenómeno violento y lleno de odio. Pero no debemos temerles", dijo. Y luego citó un texto bíblico: "Ellos nos atacan llenos de insolencia y de impiedad para exterminarnos a nosotros, a nuestras mujeres y a nuestros hijos y para apoderarse de nuestros despojos. Nosotros, en cambio, luchamos por nuestra vida y por nuestras costumbres."

Sobre el final, el ´Presidente convocó a no ceder en la disputa ideológica y elogió el rol de Vox en la política española. "Los invito a no bajar los brazos, a seguir adelante, que con Santiago Abascal y Vox podrán poner de pie España como lo estamos haciendo nosotros en Argentina", arengó. El cierre fue con su sello habitual, aunque con un tono más enfático que el resto de la intervención: "Muchísimas gracias a todos. Viva Argentina, viva España, viva Vox, viva la libertad, carajo."

Si Milei evitó referencias al escenario interno, excepto la mencion de que defiende su gestión "con uñas y dientes", los anfitriones se encargaron de aludir a ello de manera indirecta. Tras su participación, uno de los presentadores agradeció el contacto y deslizó: "Queremos mandarte toda nuestra fuerza, todo nuestro ánimo en estos momentos en que muchos se están juntando para tratar de hacerte daño. Tienes todo nuestro respaldo."

El episodio dejó en evidencia la tensión entre la proyección internacional que busca consolidar Milei y la fragilidad política que atraviesa en el plano doméstico. Mientras su mensaje se concentró en una narrativa global de la derecha, las referencias a la crisis argentina llegaron desde afuera del país, en boca de quienes lo presentaron.