La presidente de AySA y pre candidata a intendente de Tigre por el Frente de Todos, Malena Galmarini, denunció en la Justicia un incidente que derivó en el allanamiento de la base de operaciones del Centro de Operaciones Tigre (COT) y la confiscación de la grabación de las cámaras de seguridad del lugar de los hechos, además del teléfono móvil de un chofer municipal, que será peritado próximamente.

Galmarini presentó la denuncia en la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio de Tigre, a cargo del fiscal de Benavídez, Jorge Sebastián Fittipaldi.

La funcionaria explicó que el agente municipal del móvil del COT, que estaba custodiando la clausura de una obra en la intersección de Madero y Tacuarí en Tigre Centro, generó una acción de hostigamiento contra ella y un colaborador, al exigirles identificación para ingresar al predio, a pesar de que ellos nunca habían mencionado que quisieran hacerlo. Los datos de los denunciantes fueron anotados en un "cuadernito" en el que, según el agente municipal, se registraban los ingresantes al predio de la empresa nacional.

Galmarini señaló que, además de ser un caso de malversación de recursos públicos, se trata de un caso de violencia por motivos de género. La violencia política queda evidenciada en el intento de amedrentamiento por parte de la fuerza municipal hacia una mujer candidata a intendenta del distrito. "No lo van a lograr; voy a llegar al ejecutivo municipal el 10 de diciembre", dijo Galmarini.

La violencia simbólica, por su parte, se reflejó en la foto de Galmarini y su acompañante, tomada desde adentro del móvil del COT, con la leyenda "Por lo visto nada que hacer en casa", subida por el agente municipal a su estado de WhatsApp. Galmarini sostuvo que este acto es machista y sexista, y que los hechos denunciados ocurrieron durante su labor como presidenta de la Empresa AySA. "¿Por qué tendría que tener otra cosa que hacer en el ámbito doméstico? ¿Allí es donde les dicen a los agentes municipales que debemos estar las mujeres?", agregó.

Galmarini también denunció que las cámaras de videovigilancia del COT, diseñadas para la seguridad de los y las tigrenses, están siendo utilizadas con otros fines, como el control y la persecución política. "Recuerdo lo sucedido en una movilización de vecinos y vecinas contra la cuarentena, y ahora, ¿vuelven a utilizar la misma metodología con quienes no coincidimos con su línea política?", sostuvo.

La dirigente recordó que la función de los móviles del COT es realizar recorridas en prevención de delitos en todo el municipio y no permanecer detenidos en lugares puntuales, como en el caso de la obra de Tacuari y Madero. "Es un claro caso de abuso de poder", concluyó.