En esta noticia

En su primera visita a la Argentina, en el marco de una misión que incluyó a Uruguay y Paraguay, Fabian Hamilton, flamante representante comercial de Reino Unido en el Cono Sur explicó cuál es la clave para negociar con Donald Trumpy habló sobre el rol de China en la industria mundial.

"Argentina es el gigante entre esas dos naciones más pequeñas", arrojó entre muchas más frases que dieron cuenta de su entusiasmo al conocer la "fantástica" ciudad de Buenos Aires donde su abuelo, un ex jugador profesional de fútbol, "pasó mucho tiempo", en la década de 1930.

Las relaciones diplomáticas entre el Reino Unido y la Argentina llevan 200 años, desde la firma del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación, el 2 de febrero de 1825, sin embargo, gran parte de la historia está marcada por el conflicto bélico y el reclamo de soberanía sobre la Islas Malvinas que la Argentina mantiene en los tribunales internacionales.

El trágico antecedente "no representa un obstáculo" en el vínculo comercial entre la Argentina y Reino Unido ya que "aunque ambas posiciones son irreconciliables, nunca más vamos a ir al conflicto (armado)", enfatizó Hamilton en diálogo exclusivo con El Cronista.

"Mi trabajo es abrir puertas para crear relaciones personales, para asegurar que las empresas del Reino Unido que quieran invertir en Argentina puedan hacerlo sin demasiados bloqueos y escuchar las necesidades de las firmas argentinas que quieran venir al Reino Unido", resumió el funcionario que se desempeñó durante 28 años como parlamentario.

- ¿Qué impresión se lleva de la vista a los países del sur de América?

- Me gustó mucho Montevideo, pero cuando llegué aquí a Buenos Aires, reconocí una ciudad de clase mundial; una ciudad enorme, extraordinaria y mucho más grande. La población aquí es cuatro veces la de Uruguay; es un sentimiento totalmente diferente. Ni mejor, ni peor. En términos de negocio, Paraguay es más grande que la población de Uruguay, pero menos desarrollada.

Entiendo que deberíamos enfocar un gran esfuerzo en Argentina. No en detrimento de los otros dos, sino porque los mercados están aquí: 48 millones de personas; un país muchas veces el tamaño del Reino Unido, con un potencial fantástico que ahora se está abriendo gracias a las nuevas políticas económicas.

- ¿Con qué autoridades o empresarios mantuvo reuniones?

- He conocido un montón de personas de diferentes organizaciones; hicimos una gran recepción con más de 20 líderes en distintas áreas como desarrollo de propiedades, ciencias, farmacéutica, minería y energía.

También tuvimos una reunión privada con cinco ejecutivos de entidades como la Sociedad Rural y la Unión Farmacéutica. Fantásticas personas que realmente querían que su país fuera más abierto y sentí que podíamos tener una buena relación futura.

Hamilton encabezó una recepción para líderes del sector privado y funcionarios en la Residencia de la Embajadora Kirsty Hayes
Hamilton encabezó una recepción para líderes del sector privado y funcionarios en la Residencia de la Embajadora Kirsty Hayes

Además, conocí a su secretario de Minería, Luis Lucero, un gran hombre, muy anglófilo. Alguien con quien realmente podríamos hacer acuerdos de comercio. Al final, esto se trata de conocer a la gente, por eso volveré cada seis meses, durante los próximos cuatro años.

Guerra de aranceles: acuerdo con EE.UU.

- Recientemente Reino Unido firmó el primer acuerdo de comercio con Estados Unidos ¿Cuál es la clave para negociar con Donald Trump?

- Creo que Donald Trump es una persona difícil porque no es consistente y le gusta que lo adulen. Cuando mi primer ministro, Keir Starmer, envió una carta al Rey Carlos invitando a Donald Trump a venir a visitar nuestro país, fue un gran golpe.

De una manera muy inteligente (Starmer) los reunió a los dos. Aunque fue criticado, en realidad fue brillante porque es muy importante que tengamos ese acuerdo de comercio. Que no paguemos grandes tarifas que están siendo una amenaza.

- ¿Qué recomendación podría darle a la Argentina en su negociación?

- Su actual presidente (Javier Milei), es consistente, no cambia de idea cada cinco minutos y es un economista, entiende la economía. Así que creo que la clave es halagar al presidente Donald Trump, intentar superar las inconsistencias; decirle lo que quería escuchar y darle lo que quería. Argentina tiene una buena conexión y amistad con Estados Unidos. Al menos sus presidentes están en la misma línea política y podrían obtener un resultado similar desde el Mercosur si juegan bien sus cartas.

- En medio de la guerra comercial ¿Qué opina del rol de China en el comercio mundial?
-China es ahora la segunda economía más grande del mundo. Ha trabajado duro para lograrlo. La gente no ha tenido mucha opción porque no hay democracia allí pero han sido muy inteligentes en el camino durante las últimas tres décadas. Han pasado de ser una economía de ingreso medio a ser un gigante. Y que quede claro, los productos son muy buenos. El interrogante es sobre la seguridad en el largo plazo.

Hemos escuchado mucho de los chinos tratando de comprar
todos los minerales y materiales raros del mundo, incluyendo el petróleo. Creo que eso ha disminuido un poco. Creo que hay una preocupación sobre el crecimiento militar de China y el dinero que ha puesto en desarrollo de armas. ¿Por qué está haciendo esto? Pero luego tienes que preguntarte si China ha sido un agresor en el pasado. No, pero no es una democracia.

Deberíamos ser cuidadosos sobre sus intenciones ¿Cómo Donald Trump va a relacionarse con China? ¿Cómo va a afectar el intercambio mundial? No creo que debamos entrar en pánico sino ser racionales, pero entender mejor a China.

- ¿Qué significa?

- Estudiar el país y su historia reciente; intentar predecir lo mejor posible sus intenciones, pero no hacer de China un enemigo. Porque son cruciales para el intercambio y la manufactura mundial. Porque hacen mucho y son muy buenos y con buenos precios también. Tenemos mucho que apreciar de China, pero debemos estar atentos a sus intenciones en el futuro.

- Sobre el intercambio comercial con Argentina ¿Dónde hay oportunidades de comercio o inversión?

-La respuesta obvia sobre las importaciones: hay muchos productos de la agricultura, mucha carne argentina, no hay duda de eso. Pero en términos de intercambio, tenemos compañías mineras con el reciente acuerdo de litio con Río Tinto, que valió más de 2 billones de dólares; es un gran contrato y es un mineral muy importante para la decarbonización en términos de baterías y tecnologías.

La energía, por supuesto. ¿Vas a producir el hidrógeno verde? ¿Cómo se encaja con nuestros modelos de comercio? El sector farmacéutico y su desarrollo con presencia de dos compañías muy importantes: GlaxoSmithKline y AstraZeneca.

Todo esto es parte del intercambio pero también el conocimiento técnico sobre el sistema de metro (subte); las carreteras con tecnología asociada al transporte; infraestructura energética y su explotación de minerales críticos.

Hay una gran cantidad de áreas de experiencia en las que el Reino Unido puede ofrecer no consultoría pero entrenamiento, conocimiento, experiencia, para ayudar a la infraestructura argentina a desarrollarse mejor. Londres todavía es uno de los centros financieros más grandes del mundo: FinTech, conocimiento financiero y negocios en futuros financieros es algo que todos sabemos y que podemos ofrecer a la Argentina y negociar.

El reclamo de soberanía por las Islas Malvinas

-Respecto a las diferencias históricas por las islas Malvinas ¿puede ser un obstáculo en las negociaciones comerciales?

-No, no debe ser así. Entiendo la posición constitucional de Argentina, pero nunca más vamos a ir ala guerra, perdón al conflicto. Primero, no es algo que debería intervenir con el vínculo de Argentina con el Reino Unido y, segundo, con cualquier negocio actual o esperado en términos de comercio o inversiones. No creo que sea un obstáculo, ambos tenemos nuestras posiciones, no van a cambiar, son irreconciliables.

Para nosotros, obviamente, el futuro de la gente de la isla es importante. Para ustedes, las islas son importantes. Pero no son un obstáculo porque nuestra relación es demasiado importante y el negocio futuro entre nuestros países es demasiado importante.

El comercio total de bienes y servicios entre el Reino Unido y Argentina fue de 2.100 millones de libras esterlinas en 2024, un aumento del 2,5%, según el departamento de Comercio de Reino Unido.

Mientras las exportaciones totales del Reino Unido a Argentina descendieron a £787 millones (- 6,4%), las importaciones aumentaron a 1.300 millones de libras esterlinas (8,5%).

Con estos resultados, el Reino Unido reportó un déficit comercial total de 548 millones de libras esterlinas con Argentina, en comparación con un déficit comercial de 389 millones de libras esterlinas en los cuatro trimestres de 2023.