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A horas del derrotero parlamentario que sufrió el Gobierno en la Cámara de Diputados donde sólo pudo blindar el veto al aumento en las jubilaciones, el Ministro de Economía, Luis Caputo, desestimó el impacto y aseguró: "no nos vamos a mover ni un ápice" de la política de superávit fiscal, durante su participación en el Council of The Americas (COA).

Durante el cónclave que se llevó a cabo este jueves en el hotel Alvear, también en medio de denuncias de corrupción en la cartera de Discapacidad que motivó el desplazamiento de Diego Spagnuolo del gabinete nacional, el titular de hacienda intentó llevar calma a los mercados.

"El Presidente ya nos había advertido, en febrero, que iban a venir con todo: cuánto mejor nos vaya en lo económico, más ataques en julio - agosto", señaló Caputo y se enfocó en los resultados de un plan "sofisticado" que, según señaló "muchos lo criticaron y pocos lo entendieron".

Con una placa que expuso ante el auditorio del salón principal del Alvear Palace, Caputo señaló que se pasó de un déficit financiero de 4,8% en 2023 a un superávit de 0,3% en 2025 y, entre otros datos, mencionó que los pasivos remunerados bajaron de 64, 1 millones a cero.

También resaltó la mejora del Riesgo País que bajó a 730 puntos desde 2300 en el cierre de la gestión anterior y dijo que si bien el Fondo Monetario Internacional (FMI) proyecta que la Argentina será el país con mayor crecimiento en 2026, " trabajamos para que sea el país con mas crecimiento en los próximos 30 años".

En la apertura, Mario Grinman, titular de la Cámara Argentina de Comercio que organiza el evento junto a AS/COA respaldó el rumbo político y económico: "este es un momento de definiciones", dijo y señaló que "no hay mucho camino: podemos optar por un mayor peso del Estado y regulaciones por doquier o por la desregulación y hacer las cosas para insertarnos en un mundo globalizado".

Dólar, tasa y déficit de cuenta corriente

A su turno, en el cierre del Council, el presidente Javier Milei defendió el equilibrio fiscal -le agradeció a los "83 héroes" que blindaron el veto al aumento de 7% para los jubilados- y aseguró que "solamente el equilibrio fiscal va a asegurar un crecimiento del 4%, pero si sumamos la desregulación y la apertura va a ser más alto.

En medio de críticas a la oposición y al "riesgo Kuka", Milei aseguró que el tipo de cambio flota. "Hoy el dólar no difiere de cuando asumimos y ni hablar si lo ajustamos por inflación", dijo y destacó el saldo comercial y las promesas de inversión que recibió. "De acá para adelante lo que sobran son dólares", dijo Milei.

Por otra parte, de cara a las altas tasas de interés que encarecen el crédito y ponen en riesgo a la actividad económica, Milei buscó desdramatizar. "Hay que tener en cuenta que no son sólo los dólares sino el precio respecto al peso y la dura política monetaria que llevamos. No nos dejamos llevar por los cantos de sirena que piden emisión monetaria para que estén tranquilos con la tasa de interés".

"En un año electoral, con volatilidad en la demanda de dinero y del otro lado está el riesgo Kuka, donde la quieren la tasa de interés. Menos llanto por la volatilidad de la tasa que bastante estamos llevando la economía a pesar de los 'kukas'", agregó.

El tercer punto donde busco defenderse de las críticas a su gestión económica fue el déficit de cuenta corriente, sobre el que alertó incluso el FMI. Milei se lo atribuyó a las importaciones de bienes de capital para la reactivación de la economía. "Si el déficit es generado por inversión, no es un problema", aseguró. Y agregó que "1,8% de déficit de cuenta corriente no es nada, y sobre todo si es por el sector privado. Terminado el riesgo kuka tras las elecciones, la tasa va a bajar y va a aumentar más el déficit de cuenta corriente", planteó ante una reunión con menos figuras de peso y una agenda centrada en las voces del oficialismo.

Los dólares del futuro

También Caputo buscó enfatizar que habrá abundancia de dólares en el futuro, algo que uno de los empresarios presentes calificó como "la base de la religión monoteísta, vender la idea de un paraíso, la tierra prometida, el más allá".

La clave para el Gobierno está en el sector agropecuario, que hoy lidera el ingreso de divisas pero se suma la apuesta por el de minería y energía, de donde están comenzando a moverse inversiones.

Con esto, hacia 2030, el gobierno espera que al nivel de superávit que generan los principales commodities del campo, y que hoy alcanza los u$s 29.000 millones se sumen u$s 54.000 millones de energía y minería.

Ruidos en alza

Del otro lado el auditorio no escatimó en aplausos sin embargo, en el pasillo, la preocupación por el salto de las tasas de interés y el crecimiento de problemas que no coinciden con "una economía normal" se sintieron.

Por el salto en las tasas de interés la cadena de pagos está en el foco de la tormenta, "hasta ahora ruidos manejables pero si esto se extiende hasta octubre como el propio gobierno reconoce va a ser inmanejable no sólo para las pymes, sino para las empresas más grandes", explicó un empresario a El Cronista.

Otro sector afectado es el de la Construcción que está "planchado", luego de experimentar una caída de 25% hasta junio de 2024. "Este nivel de tasas es inviable en el tiempo", reconoció Gustavo Weiss, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) y dijo que "algo hay que hacer".

Gustavo Weiss, presidente de Camarco
Gustavo Weiss, presidente de Camarco

Sin embargo, reconoció que no espera que el panorama cambie hasta después de octubre, por el ruido que genera el contexto electoral en la economía.

En cambio, para el sector agroexportador en el escenario de tasas altas "quedarse en pesos" puede ser una "oportunidad" para hacer "carry trade". Los referentes del campo se muestran optimistas con las señales que da el gobierno nacional y satisfechos por la mención que hizo Caputo al aporte de dólares del campo.

En ese sentido, Marcos Pereda Born, vicepresidente de la Sociedad Rural Argentina confió en que llegue más alivio en 2026, aunque los precios internacionales no garantizan un salto en la liquidación.