En esta noticia

El Gobierno está decidido a dejar de tener empresas en el sector energético. Buscará deshacerse de Enarsa, vender su parte en Transener y que la mayorista Cammesa tenga menor incidencia en la política eléctrica.

El secretario Coordinador de Energía y Minería, Daniel González -que reporta al ministro de Economía Luis Caputo- es el ejecutor de esta decisión. Según se comenta en el sector energético, la cesión a privados que viene más avanzada es la de Transener. Ya hubo algunos sondeos informales.

Transener es la principal empresa de transporte de energía eléctrica de alta tensión del país y conecta a las generadoras de electricidad con las distribuidoras.

Fueron fallas en unas líneas de Transener las que generaron un inédito apagón a mediados de 2019. La compañía tuvo que pagar una multa de $ 205 millones.

"No es algo que esté por cerrarse ya, pero del portfolio energético es muy probable que es la primera en la que haya movimientos próximos", destaca un conocedor del sector.

Lo que está en venta es la parte de la estatal Enarsa en Citelec. Esta sociedad posee el 51% de las acciones de Transener. La mitad de Citelec es de Enarsa y la otra mitad de Pampa Energía.

Enarsa es una petrolera estatal que nació para realizar importaciones de gas y petróleo, pero también obras que el Estado quería realizar sin ayudar de privados -como el gasoducto que conecta Vaca Muerta con Buenos Aires-. El Gobierno ya definió que no es estratégica. Pero, por ahora, no puede venderla.

Hace una semana, Enarsa ayudó con la reactivación de una de las represas hidroeléctricas que construyen los chinos en Santa Cruz. Allí, pagó una parte de los sueldos.

En cambio, si parece más avanzada la perspectiva de ir vendiendo las participaciones que posee Enarsa en distintos negocios, como Transener.

El Gobierno anunció un plan de obras de transmisión eléctrica, que mejorarían el sistema y lo ayudaría a sobrellevar los problemas de abastecimiento en los momentos de altas temperaturas.

El empresario Marcelo Mindlin es socio del Estado en Transener. Transener es una compañía "critica" en el sistema. Cuando falla, el sistema eléctrico corre peligro. Su facturación en 2024 superó los u$s 340 millones y es una firma con buen grado crediticio.

Mindlin es considerado el candidato natural por el mercado. Pero en su momento, también hubo averiguaciones por parte del grupo Perez Companc. Y se habla de un tercero que estaría dando vueltas. De todas formas, el proceso podría llevar hasta el primer trimestre de 2026, según comentan en el sector.

En el sector, se dice que el Gobierno busca -como mínimo- unos u$s 100 millones. "A valores del negocio hoy, es un número alto. Si la Argentina va en crecimiento, la demanda eléctrica también lo hará. En ese escenario, quizás se justifique", explica un especialista en fusiones y adquisiciones, que pidió no ser identificado.

Experiencia fallida

En 2018, el entonces ministro de Energía, Juan José Aranguren, manifestó su intención de vender la participación estatal en Transener. Las chinas Southern Power Grid y State Grid se aproximaron a Pampa en esa ocasión. Su interés estaba en la parte que podía vender el Estado nacional. Pero como Pampa era dueño del 50% restante, también se inició un vínculo en esa parte.

La venta de la parte estatal de Transener se frenó porque el radicalismo -que formaba parte de la coalición de Gobierno- se opuso a la operación. Aranguren fue desvinculado como ministro de Energía. Durante ese año (2018), el peso se depreció frente al dólar y el apetito inversor por el país disminuyó. Y el siguiente Gobierno abandonó la idea.

Enarsa, mientras tanto, seguirá en la mira. "Tiene que empezar a desprenderse de los negocios. No tengo ninguna duda de que eso tiene que ser una concesión privada", aseguró la secretaría de Energía, María Tettamanti, en una exposición. "El modelo es que el Estado deje de cumplir roles de empresario, promoviendo la participación privada en sectores estratégicos", dicen.