Lee Buchheit dedicó toda su carrera como abogado a especializarse en la reestructuración de deuda soberana. Y principalmente desde el banquillo de los Estados, en vez del de los acreedores. Ex miembro del estudio de abogados neoyorquino Cleary and Gottlieb, llegó a asesorar al gobierno argentino durante la negociación con los holdouts en 2016.

En contacto con El Cronista, Buchheit da su impresión general sobre cuál será el rol del FMI durante la renegociación de deuda que lleva adelante la gestión de Martín Guzmán.

¿Cuál cree que será el rol del FMI en esta negociación?

Respecto al rol del FMI, sin embargo, el Fondo será con seguridad un actor central en el drama que se desarrollará por tres razones. Primero, el FMI con una exposición de u$s 44 mil millones es el mayor acreedor. Es más, es un autoproclamado "acreedor privilegiado", lo que significa que no se considera sujeto a las medidas tradicionales de reestructuración de deuda.

En segundo lugar, algunos de los acreedores comerciales del país esperarán ver una propuesta significativa de reestructuración de la deuda acompañada de un programa fiscal a mediano plazo, preferiblemente un programa que cuente con el apoyo del Fondo Monetario Internacional.

En tercer lugar, al menos durante un período de tiempo, las instituciones financieras multilaterales como el FMI pueden ser la principal, quizás la única, fuente de financiamiento externo para el país. Naturalmente, las autoridades deberán decidir si desean aceptar nueva financiación de esa fuente, pero puede ser reconfortante saber que está disponible teóricamente.

¿Cree que en este momento debiera estar el Fondo en la mesa de negociación?

La pregunta táctica se convierte en cuándo, al abordar el problema de la deuda, deberían las autoridades involucrarse con el FMI. ¿Debería hacerse antes de que se llegue a un acuerdo con los acreedores comerciales, después de que se llegue a tal acuerdo o simultáneamente con las discusiones con los acreedores comerciales? Sospecho que esta cuestión táctica de umbral ocupará a las autoridades y sus asesores en los próximos días.

Buchheit escribió en coautoría con otros especialistas un paper para Peterson Institute for International Economics. Junto con Guillaume Chabert, Chanda DeLong, and Jeromin Zettelmeyer, en mayo de 2019, publicaron "Cómo reestructurar una deuda soberana: lecciones de cuatro décadas". Allí también comentan que el deudor soberano es el que hará la propuesta a los acreedores bajo distintos escenarios de reestructuración. Pero plantean que "detrás de las cortinas, estas propuestas ya habrán sido examinadas por el FMI que trabaja en el programa de ajuste fiscal del país para asegurar la consistencia con el programa.