Lavagna sugirió ante dirigentes rurales que bajaría las retenciones

Almorzó con titulares de varias entidades del campo y consideró que los derechos de exportación restan competitividad. Fue cauto respecto a la manera de avanzar 

En el ciclo de reuniones que viene sosteniendo con diversos sectores sociales para promover su eventual candidatura, el ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, compartió un almuerzo con una mesa de dirigentes agropecuarios y agroindustriales para escuchar sus planteos y anticiparles su borrador de plan de gobierno y su mirada sobre la política fiscal que debería adoptar la próxima administración.

En un prestigioso club ubicado en la avenida Córdoba, en una mesa chica y con almuerzo de por medio, Lavagna escuchó a los dirigentes hablar sobre las perspectivas de crecimiento del sector agroindustrial, los desafíos en materia de competitividad y la necesidad de mantener inversiones en logística para reducir costos.

El tema más álgido del encuentro tuvo que ver con la carga impositiva que hoy afrontan como resultado de la imposición de retenciones a las exportaciones, en septiembre pasado, en medio de la disparada del dólar y meses después de lanzar la negociación para tomar un préstamo con el FMI.

Los empresarios descargaron su ira contra la administración Macri, a la que ya entonces acusaron de "romper el contrato social" con este sector al que había prometido en campaña liberarle de los derechos de exportación.

Después de oírlos, Lavagna dijo que, de jurar sobre la Constitución el próximo 10 de diciembre con la banda presidencial colgada al pecho, promoverá una revisión de los derechos de exportación, en orden a eliminarlos progresivamente.

El ex funcionario, que lleva casi diez años fuera de la política partidaria, planteó que la política fiscal tiene que estar acompañada de un fuerte incremento de exportaciones, y que las retenciones restan competitividad, si bien contrapuso que una eventual quita debe ser evaluada mirando el plano general.

En esa línea, y sin que le fuera consultado explícitamente por los comensales, Lavagna blandió la posibilidad de ir por un congelamiento de las tarifas inmediatamente después de asumir, como forma de contener la inercia inflacionaria y el traslado a precios con el consecuente aumento del costo de vida para los sectores más postergados. En su visión, frenar las tarifas y "transparentar los precios relativos del mercado argentino" son condiciones imprescindibles para "normalizar los precios del mercado interno", reconstruyó una fuente convidada al encuentro.

En el plano político, el economista insistió en que todavía no es precandidato presidencial, y volvió a barajar las condiciones para avanzar en la carrera electoral: lograr un consenso entre varias fuerzas políticas, entre ellas un sector del radicalismo; lograr que los contendientes de Alternativa Federal, Sergio Massa y Juan Manuel Urtubey, desistan de una PASO, e incluir a cuantos se sientan desencantados con el Gobierno.

La decena de empresarios se sintió en confianza de interpelar al economista luego de que este rompiera el hielo con una broma -con parte de verdad-. "No vengo en calidad de ministro; así que no tengo la necesidad de mentirles", lanzó.

Entre los presentes, había representantes de Coninagro, las Confederaciones Rurales Argentinas, Copal, las federaciones de molineros, aceiteros y exportadores de cereales; azucareros y la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE).

Temas relacionados
Más noticias de FMI

Las más leídas de Economía y Política

Destacadas de hoy

Noticias de tu interés