EE.UU.: Argentina aún es un país de “tránsito para el narcotráfico, pero la producción es “creciente
Un informe del Departamento norteamericano le da parcialmente la razón al secretario de Seguridad, Sergio Berni, en su cruce con Agustín Rossi, pero señala serias advertencias sobre la posibilidad de que el status quo de la situación en el negocio de los estupefacientes se modifique en el país.
Estados Unidos advirtió que, aunque la Argentina es un país de ‘tránsito‘ para el narcotráfico, la elaboración de cocaína en ‘cocinas‘ ubicadas en el territorio nacional es “un problema creciente”.
La Argentina sigue siendo “un país de tránsito”, pero “hay una creciente producción de cocaína”, dice un informe del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre el narcotráfico en el mundo, que incluye un capítulo sobre la Argentina.
El informe se conoce un día después de que en los lagos de Palermo, en la Ciudad de Buenos Aires, fuera asesinado a balazos un ciudadano de origen colombiano mientras paseaba en bicicleta a plena luz del día. La utilización de “sicarios” que dispararon desde motos, con silenciador, a plena luz del día, la ausencia del móvil del robo, más la nacionalidad de la víctima y el dato de que portaba marihuana y pastillas de éxtasis, hace presagiar a los investigadores de que se trató de un crimen con el sello del narco.
El informe, a su vez, parece darle parcialmente la razón al secretario de Seguridad, Sergio Berni, en su cruce con el ministro de Defensa, Agustín Rossi, sobre el estatus de la Argentina en materia de narcotráfico. Rossi había señalado que la Argentina ya era un país de “producción”, pero Berni lo refutó y ratificó que sigue siendo de “tránsito”. El informe, sin embargo, contiene una serie de advertencias sobre la posibilidad de que el status quo de la situación en el negocio de los estupefacientes se modifique.
Señala sobre “retrasos judiciales que continúan complicando los procesamientos” contra narcotraficantes en el país y que “muchos argentinos creen que los crímenes vinculados con el narcotráfico crecieron”.
El Departamento de Estado insta en el documento al gobierno de Cristina Kirchner a ‘dedicar mayores esfuerzos y recursos para combatir‘ el narcotráfico y señala al paco como “un problema particular entre los pobres”, aunque apunta que la producción de esta droga en la Argentina crece pero a un ritmo “pequeño”.
La mayoría de la cocaína que pasa por la Argentina es exportada a Europa, según el informe, en el que se cuestiona que el gobierno haya dejado de publicar estadísticas anuales sobre la incautación de cocaína desde 2010, lo que “sugiere que los números de 2013 son superiores a los de 2011 y 2012”.
Asimismo, indica que, según funcionarios argentinos, el consumo anual de cocaína abarca al 0,9 por ciento de la población argentina, pero sostiene que hay una “creciente preocupación sobre el uso de drogas sintéticas y del paco en los jóvenes”.
“Durante 2013, funcionarios argentinos acusaron a varios miembros de las fuerzas de seguridad de estar involucrados en el tráfico de estupefacientes”, sostuvo el informe, en alusión a Santa Fe, donde miembros de la fuerza han sido señalados como cómplices de narcotraficantes y están siendo investigados por la Justicia.
Por otra parte, el informe del gobierno de Estados Unidos también plantea que ‘el lavado de dinero, relacionado con el narcotráfico, la corrupción, el contrabando y la evasión de impuestos ocurre a través del sistema financiero”, lo que expone a la Argentina al “terrorismo”.
“El uso generalizado de efectivo (incluyendo dólares estadounidenses) en la economía deja a la Argentina vulnerable al lavado de dinero‘, señaló el informe y agregó que ‘tradicionalmente, la Argentina tiene una economía con fuertes vínculos a la moneda estadounidense”.