Coronavirus: la pobreza podría trepar 20 puntos y alcanzar al 54,2% de los argentinos
Sería en el caso del peor escenario por la pandemia de coronavirus. El último dato oficial del Indec marca que en el segundo semestre de 2019 afectó al 35,5% de los argentinos.
Tras dos años consecutivos de recesión, el empeoramiento de la situación económica derivado del impacto en la actividad por la pandemia delcoronavirus (covid-19) arrojará también indicadores sociales muy crudos: un aumento de la desigualdad y también de la pobreza.
De acuerdo con estimaciones privadas, el porcentaje de argentinos que no llegue a cubrir las necesidades básicas llegará hasta a un 54,2%, en el peor de los escenarios.
El último dato oficial del Indec marca que en el segundo semestre del año pasado la pobreza afectó a un 35,5% de los argentinos y, a su vez, un 8% no llegaban a cubrir la canasta básica de alimentos y por lo tanto estaban por debajo de la línea de indigencia.
No obstante, en lo que va del 2020, la inflación en los primeros meses avanzó (aunque a un ritmo un escalón menor a la de fines de 2019), y los salarios no llegaron a recuperar la pérdida del poder adquisitivo de los últimos tiempos.
Martín González-Rozada, economista especializado en econometría de la Universidad Torcuato Di Tella, esbozó tres escenarios posibles para el primer semestre de 2020 en materia de pobreza: una pesimista, en el que llega a afectar a un 54,2% de la población; uno moderado, en el que alcanza a un 42,7% y, en el mejor de los caso, avanzaría unos 5 puntos porcentuales hasta un 40,1% de los argentinos.
De los datos oficiales surge que la Canasta Básica Total (CBT) que mide el Indec aumentó en marzo un 2,95%, por lo que una familia tipo (conformada por dos adultos y dos hijos menores de seis y ocho años) necesitó casi $ 42.000 para no ser considerada pobre.
González-Rozada asume una CBT para el segundo trimestre de este año un 7% más alta que la canasta promedio del primero, lo que califica de “conservador : en los últimos períodos, el incremento fue en torno al 10%.
A su vez, por el lado de los ingresos totales familiares (ITF) para el segundo trimestre se esgrimen tres escenarios que son, precisamente, los que terminan arrojando diversas posibilidades.
En el más optimista, lo hace en base a un trabajo reciente elaborado por economistas del CEDLAS (Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales, que depende de la Universidad de La Plata).
En esta opción pierden sus ingresos sólo los trabajadores no formales en ocupaciones no compatibles con el teletrabajo mientras que el resto recibe su remuneración habitual. En este caso la tasa de pobreza llegaría a 40,1%, detalló González-Rozada.
No obstante, tras el pacto UIA-CGT, avalado por el Gobierno, algunos gremios empezaron a cerrar acuerdos de suspensiones con recortes salariales (nominales) de entre un 25% y 30%.
Otro dato es que, de acuerdo con una encuesta (de más de 30.000 casos) hecha por el CEDES (Centro de Estudio de Estado y Sociedad), más de la mitad (un 55%) de la población encuestada reporta una reducción de ingresos a nivel del hogar por impacto de la cuarentena en la Argentina.
En el escenario moderado, la dinámica del mercado de trabajo sería similar a la que se atravesó en la recesión del 2009, año en el que los ingresos totales familiares crecieron, en promedio, alrededor de 4 puntos porcentuales menos que la inflación. De esta manera, la incidencia de la pobreza en el primer semestre sería de 42,7%.
En el escenario pesimista, en cambio, la evolución de las principales tasas del mercado de trabajo y de los ingresos totales familiares similar a la crisis del 2001: la tasa de empleo cayó entre 3 y 4 puntos porcentuales, la de desempleo aumentó unos de 5 puntos y los ingresos se desplomaron en promedio alrededor de 16%. En este escenario, la tasa de pobreza llegaría al 54,2%.
“Al mirar los datos oficiales entre mayo 2001 y mayo 2002 la tasa de pobreza (que se medía con una canasta diferente) subió 17 puntos porcentuales de 36% a 53%; por lo que la crisis pego muy fuerte en la pobreza , razonó González-Rozada.
La probabilidad de que cada uno de estos tres escenarios se dé, con la información preliminar de abril, son de 0,25 para el caso “optimista , de 0,30 para el “moderado y de 0,45 para el “pesimista . Así, la pobreza estimada (que surge de hacer un promedio ponderado) en el primer semestre podría llegar a un 47,2%.