A lo Uruguay: desde la oposición pedirán una baja del 30% en los sueldos políticos

La noticia de que el presidente uruguayo Luis Alberto Lacalle Pou había anunciado un proyecto de ley para crear un "Fondo Coronavirus" a través de una baja salarial para la planta política, cruzó rápidamente el Río de la Plata. Primero, como era de esperar, llegó a Twitter, donde el pedido para que la política argentina lo replicara fue tendencia. Después, con el correr de la tarde, caló en la oposición. 

La mesa chica de Juntos por el Cambio se reunió, en forma virtual por la cuarentena, para debatir una rebaja salarial que no sólo los incluya: acordaron pedir, con una carta dirigida al presidente Alberto Fernández, una baja de los sueldos de los tres poderes del Estado. Pero además del Ministerio Público Fiscal, las empresas estatales y los organismos descentralizados, además de las provincias y los municipios. 

"La actual crisis golpea la salud pero también a amplios sectores de la economía. Debe existir un esfuerzo colectivo del sector público que vaya a la par del que hace el privado", resumieron desde la oposición. El PRO apuntó que el recorte debería ser del 30% pero, al parecer, el número no fue del todo consensuado. 

Más allá de la experiencia uruguaya, una provincia ya había tomado antes una medida similar, que repercutió menos en las redes sociales y, por ende, en la oposición. Fue el mendocino Rodolfo Suárez quien anunció la semana pasada un tope salarial para la planta política, y el excendente utilizarlo para la compra de insumos para la emergencia sanitaria. "He decidido que los funcionarios políticos del Gobierno de Mendoza cobrarán sus sueldos hasta la suma de $50.000 en el mes de marzo , informó el mandatario en su cuenta de Twitter. 

En la medida mendocina, claro está, están exceptuados los trabajadores de los ministerios de Seguridad y de Salud. 

Se sabe que el tema de los sueldos públicos es algo que no le gusta debatir a Alberto Fernández: lo ve como una bandera de la antipolítica. No es la primera vez, además, que se discute. Apenas asumió también se planteó lo mismo pero, en esa ocasión, para combatir el hambre. "Ya lo hicimos, nos congelamos el sueldo, lo que en la práctica es una baja de 25 puntos", razonaron desde el oficialismo parlamentario. 

El 27 de diciembre, tanto Sergio Massa, desde la Cámara de Diputados, como Cristina Fernández de Kirchner desde el Senado, decidieron congelar por 180 días los sueldos y dietas de senadores y diputados. 

Desde la Quinta de Olivos, por el momento, no quisieron realizar comentarios.