Tras la reaparición de Macri, Alberto celebró 'amistad' con Larreta en una fuerte apuesta antigrieta

Mientras que el expresidente volvió con un mensaje confrontativo, el actual mandatario volvió a rescatar su sintonía con el jefe de gobierno porteño durante el acto por el Día de la Independencia.

El impacto por la pandemia del coronavirus actual se expresa en todas las dimensiones. A las consecuencias sanitarias y económicas evidentes se agrega un componente político. El manejo de la crisis produjo reordenamientos del mapa partidario. Es decir, quienes se encuentran en funciones ejecutivas, a pesar de tener recorridos y pensamientos distintos, encararon la pandemia de forma similar.

La mejor expresión de este reordenamiento es el vínculo construido entre el presidente Alberto Fernández y el jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires Horacio Rodríguez Larreta. Uno fue propuesto para el cargo por Cristina Kirchner. El otro fue mano derecha de Mauricio Macri durante más de diez años.

A pesar de sus pertenencias partidarias e ideológicas disímiles, la pandemia los encontró aliados, con un mensaje y abordaje común. Se suma a este grupo Axel Kicillof. El gobernador bonaerense, a pesar de ser parte del Frente de Todos, no tiene tampoco la misma pertenencia que Fernández dentro de un gobierno que nació como una coalición de distintos sectores peronistas.

Entre los tres han tenido que gestionar el territorio en donde más fuerte pegó la pandemia en la Argentina: el Área Metropolitana de Buenos Aires. Si bien hubo algunos chispazos aislados, prevaleció la concordia y el consenso en todas las decisiones relevantes. De hecho, hasta se espera que la flexibilización posterior al 17 de julio que planeaba encarar la ciudad de Buenos Aires pueda cruzar la General Paz.

La mejor expresión de esta sintonía política se pudo ver hoy, durante los festejos por el 204° aniversario de la independencia argentina. Fernández participó del acto mediante una videoconferencia. Detrás de él había una pantalla en donde se podía ver a los representantes de los 24 distritos argentinos.

Fernández nombró uno por uno a los gobernadores, pero en algunos casos se detuvo para expresar algún adjetivo. No llamó la atención que les diga amigos a Gildo Insfrán, Juan Schiaretti o Jorge Capitanich, reconocidos aliados políticos. Sí fue significativa la forma en la que enfatizó al decir “mi amigo Horacio Rodríguez Larreta , una de las figuras de mayor peso político del arco opositor.

El gesto no solo tuvo peso por sí mismo, sino que al contextualizarlo gana más valor. Es que ayer reapareció en la escena pública Mauricio Macri. Fue la primera vez en la que habló desde el inicio de la cuarentena. El expresidente lanzó un mensaje crítico al gobierno, y le pidió que “no avancen sobre nuestras libertades, hagan las cosas sobre el marco institucional .

zzzznacp2NOTICIAS ARGENTINAS BAIRES, JULIO 8: El ex presidente Mauricio Macri en su regreso a la escena pública durante una entrevista que brindó al periodista  lvaro Vargas Llosa grabada la semana pasada. Foto NAzzzz

Esta diatriba, sin embargo, puede ser una suerte de búmeran. Es que aquello que se critica a Fernández puede ser dicho contra Rodríguez Larreta. Si bien las responsabilidades de ambos son distintas, las políticas trazadas a nivel nacional y las implementadas en la ciudad de Buenos Aires son similares.

En definitiva, esta reaparición de Macri permite vislumbrar nuevamente las diferencias internas en Juntos por el Cambio. El expresidente, secundado por Patricia Bullrich, encarna la posición más radical dentro del Pro, que no ahorra críticas a la gestión actual. Un aliado interno impensado de esta postura es Alfredo Cornejo. El titular de la UCR nunca había ocultado sus diferencias con Macri. Pero con la firma del comunicado sobre el asesinato de Fabián Gutiérrez se posicionó en el mismo lugar que Bullrich.

Mientras tanto, Juntos por el Cambio conserva voces moderadas que buscan encontrar puntos de diálogo. María Eugenia Vidal y Rogelio Frigerio en el Pro son los máximos exponentes. En el radicalismo, Martín Lousteau conserva un silencio que se lee en clave de prudencia. Y Gerardo Morales, otro que no solía ahorrar críticas al peronismo, debe preocuparse por la pandemia del mismo modo que Fernández y no pierde tiempo en chicanas.

Esta configuración de Juntos por el Cambio se replica casi en forma de espejo en elFrente de Todos. La moderación y búsqueda de diálogo de Fernández fueron reafirmadas en su discurso de hoy. Sin embargo, debe lidiar internamente con otros sectores vinculados a la expresidenta Cristina Kirchner, preocupados por la actuación de la Justicia. La excarcelación de Lázaro Báez fue el último de varios capítulos judiciales de las últimas semanas.

De un lado Mauricio Macri, del otro lado Cristina Kichrner. Los expresidentes tensan la grieta que los tuvo como protagonistas de la última década en el país. En el medio, los sectores moderados buscan el entendimiento en el marco de una pandemia.

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