LA DESAPARICIÓN DEL PESQUERO RIGEL

Un siniestro que se pudo haber evitado

El Secretario General del Sindicato de Obreros Navales advirtió días atrás sobre la obsolescencia de la flota pesquera argentina.

En su columna de opinión en Transport & Cargo de hace solo dos semanas Juan Speroni, Secretario General del Sindicato de Obreros Navales de la República Argentina (Saon) fue premonitorio.

"Es conocido públicamente que los distintos actores de nuestra comunidad productiva vienen reclamando la reconversión de una flota pesquera que promedia los 40 años de antigüedad que opera en nuestro litoral marítimo. Las distintas instituciones estamos solicitando hace décadas la construcción de este proyecto que generaría la posibilidad de poner en un eslabón alto a los astilleros y talleres de la industria naval argentina. Mientras se da este debate con la ausencia de las decisiones políticas de las distintas administraciones de nuestro país, la flota pesquera argentina ha tenido accidentes trágicos con pérdidas de vidas humanas que pareciera no importarle a los distintos gobiernos de turno", escribió el gremialista.

El siniestro ocurrido en el pesquero Rigel con 9 tripulantes a bordo, que perdiera contacto durante la noche del pasado viernes, pone en valor la advertencia de Juan Speroni.

La embarcación de más de 50 años, propiedad de la empresa Pesca Nueva SA, fue botada en el astillero Vanoli en 1968. Tenía 27 metros de eslora y 6 de manga.

"Los últimos tres hundimientos tienen un inexcusable común denominador, todos los barcos tenían más de 50 años", dijo a Transport & Cargo Juan Speroni.

El sindicalista expresó la urgente necesidad de reconvertir una flota pesquera compuesta por 800 barcos con edad promedio de 40 años a partir de un plan de construcción en astilleros nacionales.

Gestionar"Sobre un recurso como el ictícola que es patrimonio del pueblo argentino, las administraciones políticas deberían gestionar y administrar para generar sustentabilidad en toda su cadena de valor subrayando que como en cualquier país del mundo lo más sagrado es la construcción del valor agregado de una actividad extractiva. El camino en la toma de decisión de esta decisión política pondría a toda la industria naval argentina en un proceso de alta producción para los trabajadores técnicos profesionales y empresarios del sector, cuantificando exponencialmente los salarios fortaleciendo el mercado interno y al mismo tiempo fortaleciendo al estado producto de lo tributado y de los impuestos que tendría que cobrar", aseveró Speroni.

 

En la misma nota del pasado 30 de mayo donde advirtió la posibilidad de nuevos siniestros por la antigüedad de la flota, Juan Speroni pidió "a las autoridades políticas del sector que convoquen de forma urgente a una reunión a las cámaras empresariales de la industria naval argentina, organizaciones sindicales, comisión de Intereses Marítimos Fluviales y Pesqueros de la Cámara de Diputados y del Senado de la Nación porque se trata de defender el trabajo argentino, la soberanía y de tener un proyecto que garantice sustentabilidad en el corto, mediano y largo plazo".

Seguramente haya llegado la hora de hacerle caso a Juan Speroni y actuar en consecuencia para no lamentar nuevas víctimas, y reactivar una industria como la naval que es una de las mayores generadora de mano de obra.

Temas relacionados
Noticias de tu interés