EL VALOR DE LA EMPRESA CRECIÓ U$S 2800 MILLONES EN POCAS HORAS

El proyecto de privatización de Eletrobras desató euforia en los mercados brasileños

El gobierno espera recaudar cerca de u$s 6300 millones para reforzar las arcas públicas. La oferta no incluirá las centrales termonucleares ni la hidroeléctrica Itaipú

El proyecto de privatización de Eletrobras desató una euforia bursátil en Brasil y elevó en u$s 2800 millones (R$ 9000 millones) la valuación de mercado de la empresa estatal.

Aunque el gobierno de Michel Temer señaló que aún resta realizar el estudio para cotizar a la empresa y definir un modelo para concretar la venta a privados, los analistas creen que el Estado podría recibir cerca de R$ 20.000 millones, es decir alrededor de u$s 6300 millones, los que saldrían al rescate de las exhaustas arcas brasileñas.

La oferta no incluirá en un primer momento las centrales termonucleares y a la hidroeléctrica de Itaipú.
Según el ministro de Minas y Energía, Fernando Coelho Filho, la propuesta comenzará a discutirse hoy. "Vamos a someter al Programa de Asociación de Inversiones (PPI) la desestatización de Eletrobras", afirmó y dijo que "es un movimiento de fundamental importancia para el desarrollo del sector eléctrico brasileño".

Aunque el proceso difícilmente podrá concluir durante el mandato del presidente Michel Temer, a fines de 2018, los inversores lo recibieron con euforia.

Los papeles de Centrais Eletricas Brasileiras treparon un 48,87%. El índice Bovespa de la Bolsa de Sao Paulo, en tanto, superó los 70.000 puntos por primera vez desde enero de 2011. La empresa tiene una deuda de unos u$s 5.900 millones.

Según un comunicado del Ministerio de Minas y Energía (MME), la privatización "traerá más competitividad y agilidad a la empresa para gestionar sus operaciones, sin las ataduras impuestas a las estatales". "Hay una percepción en el gobierno de que la empresa no tiene la velocidad necesaria ni los recursos suficientes para poder hacer frente a los pasivos que se generan, subrayó Coelho Filho.

El gobierno podría optar por vender el control total de Eletrobras o abrir su capital para minimizar la participación accionaria del Estado pero conservar el derecho a veto de las decisiones contrarias a sus intereses mediante una "acción de oro", según explicó la asesoría del ministerio.

Al respecto, el secretario ejecutivo del Ministerio de Minas y Energía, Paulo Pedrosa, dijo que "en un primer momento" el Estado podría reducir su participación a un 40%, aunque con el tiempo podría disminuir más.
En simultáneo, la desestatización incluiría una propuesta para cambiar el modelo tarifario que rige sobre la generación de energía de Brasil. Ello permitiría que parte de lo recaudado ingrese al Tesoro para paliar el enorme déficit fiscal del Estado.

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