Preparan el terreno para elaborar una nueva fórmula de movilidad

Aunque no fue publicada, el Gobierno explicó que esta vez respetó la fórmula de la ley de Movilidad para aplicarla en septiembre y no intentó cambiarla, como en marzo pasado, cuando buscó dejar de sobrevalorar el dato de la recaudación tributaria, pero tuvo que volver en sus pasos por el alto rechazo que generó la medida.
Sin embargo, se trata de un debate que prevé dar en el Congreso junto con la reforma previsional y en la medida que baje la inflación, que espera que sea de un dígito anual en 2019.
Según indicaron fuentes oficiales, el Congreso deberá definir si la fórmula de movilidad seguirá la variación de los precios (el IPC, como pide la OCDE) o de los salarios (RIPTE o el índice de salarios).
Con una inflación decreciente, el gasto previsional se vuelve una carga alta e inflexible para reducir el déficit fiscal y amenaza la sustentabilidad del sistema, porque el gasto crece según la inflación pasada, mayor a la actual.

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