De la mano de grupos argentinos, vuelve el boom inmobiliario a Punta del Este

El auge que experimentó la zona uruguaya donde se encuentra Punta del Este a partir de 2005 y que se debilitó desde 2013 está de regreso. 

Si bien los emprendimientos están lejos del récord alcanzado en 2013 con 81 edificios en construcción, según datos de la consultora Reporte Inmobiliario, el sector cobra nuevamente auge, tras haber sido reemplazado en algunos casos por Miami como lo hicieron los empresarios locales Sergio Grosskopf y Eduardo Costantini.

Sin embargo, en julio del año pasado, Grosskopf presentó un permiso para levantar cuatro torres en predios ubicados en la parada 16 de la playa Mansa. Lo mismo ocurrió con el grupo Weiss, que tiene en carpeta un proyecto de torre de más de 30 pisos.

Otro grupo argentino adquirió el emblemático hotel y restaurante La Posta del Cangrejo de La Barra para levantar un edificio de 32 unidades. Tanto el hotel como el restaurante funcionaron hasta el pasado verano y sus propietarios lo vendieron por u$s 8 millones.

Las iniciativas representan inversiones por u$s 400 millones y también involucran capitales de otras nacionalidades. El mayor es el edificio de World Trade Center que estará ubicado sobre Gorlero y calle 23 frente a la plaza Artigas y a dos cuadras del puerto. Según una nota publicada ayer por el diario uruguayo El Observador, se trata de un edificio de 25 pisos que se destinará a oficinas de servicios.

Además, en el complejo Solanas se impulsan seis torres de cuatro pisos cada una y otras dos en predios ubicados en las paradas 2 y 3 de la avenida Roosevelt. También hay presentado un proyecto para reconstruir un esqueleto en parada 16 de la misma avenida.

De acuerdo al medio del país vecino, en Rincón del Indio, próximo a playa Brava, hay otros tres proyectos: uno conformado por dos torres y otro de siete torres de entre 63 y 79 metros de altura, más dos bloques de 15 metros en altura. Otro edificio de 21 pisos con centro comercial se ubicaría próximo al sanatorio Mautone de Maldonado. Por su parte, el hotel Las Dunas de Manantiales que hoy está abandonado será demolido y se levantarán viviendas en propiedad horizontal. La inversión será de u$s 40 millones y totalizará 15.610 metros cuadrados. En la zona de ruta 10 y 104 se construirán tres torres de cinco pisos y habitaciones individuales por 18.456 metros cuadrados de construcción.

En diálogo con El Observador, la directora general de Urbanismo de la Intendencia de Maldonado, Soledad Laguarda, explicó que cada uno de los proyectos deberá pasar en los próximos meses por la Junta Departamental de la Intendencia de la localidad para su aprobación. También aclaró que las iniciativas con luz verde se pondrán en marcha sobre fin de este año y principios de 2018.

Los trabajos no podrán superar los dos meses contados a partir de la aprobación del permiso de construcción y el 70% de la mano de obra deberá tener residencia comprobada en la zona, según se establecerá por decreto municipal. Además, cada una de esas obras no podrá paralizarse y se considera detenida cuando cuente con una dotación de personal inferior al 50% del necesario para el tipo de construcción, según la etapa en la que se encuentre.

De no cumplirse con esos requisitos, los proyectos perderán los beneficios fiscales para los permisos de obra nueva o ampliación de edificaciones existentes otorgados por la intendencia.

 

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