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Un descubrimiento arqueológico en Israel tiene el potencial de transformar la narrativa del cristianismo. Se trata del Mosaico de Megido, una inscripción de 1,800 años que proclama a Jesús como Dios.

Este mosaico, hallado en el subsuelo de una prisión israelí, pertenece a la casa de oración más antigua conocida. Ya es considerado "el mayor descubrimiento desde los Rollos del Mar Muerto", según los expertos del Museo de la Biblia en Washington D.C.

El descubrimiento cristiano más relevante desde los Rollos del Mar Muerto

Un mosaico de 1,800 años conocido como el "Mosaico de Megido" tiene el potencial de revolucionar nuestra comprensión del cristianismo primitivo. Este hallazgo, descubierto en el subsuelo de la prisión de Megido, Israel, en el año 2005, fue objeto de excavaciones durante un periodo de cuatro años por parte de la Autoridad de Antigüedades de Israel y actualmente se encuentra en exhibición en el Museo de la Biblia en Washington D.C.

De acuerdo con el CEO del museo, Carlos Campo, este descubrimiento es "el mayor hallazgo desde los Rollos del Mar Muerto" y podría representar el testimonio físico más antiguo de la divinidad de Jesús, dado que presenta la inscripción en griego: "El dios-amante Akeptous ha ofrecido la mesa a Dios Jesucristo como memorial".

Un hallazgo en Israel podría revolucionar la historia del cristianismo con un mosaico antiguo. (foto: archivo).
Un hallazgo en Israel podría revolucionar la historia del cristianismo con un mosaico antiguo. (foto: archivo).

Descubre qué revela el "Mosaico de Megido" hallado en Israel

El mosaico, que data del año 230 d.C., pertenecía a una capilla privada descrita como la "casa de oración más antigua conocida". Según los investigadores, su proximidad a un campamento romano sugiere un notable grado de coexistencia entre romanos y cristianos, lo que contrasta con las narrativas de violencia comúnmente asociadas entre ambos grupos.

Además, el mosaico incluye los nombres de cinco mujeres, destacando el de Akeptous, quien donó una mesa al lugar de oración. Esto, según Bobby Duke, director de la Iniciativa de Académicos del Museo de la Biblia, subraya el papel fundamental de las mujeres en la iglesia primitiva, evidenciando su influencia y contribución en el desarrollo de la comunidad cristiana.