Ola de calor en Europa: conocé Fuerteventura, la playa de moda en Canarias

Es la segunda isla en extensión del archipiélago, mundialmente conocido por sus playas de paisaje lunar, custodiadas por volcanes. Combina cicloturismo, travesías en camello y gastronomía rural.

Especialistas en clima aseguraron que Europa estará afectada por una ola decalor "potencialmente peligrosa" entre el próximo miércoles y jueves, con temperaturas que alcanzarían los 38 grados.

La empresa Accuweather informó que "la ola de calor esperada es el resultado de una tormenta que se estancó sobre el Océano Atlántico y una alta presión" sobre la región central y oriental del continente, que "sacará aire muy caliente de África hacia el norte a través de Europa".

El país que primero sentirá esta ola de calor intenso será España. "Desde 1947, solamente la ola de calor del 18 al 28 de junio de 2005 ha sido tan temprana. El próximo episodio parece mucho más intenso, sin precedentes en junio", resaltó el periódico español ABC.

Españoles y turistas se alistan para encontrar refugio en destinos de playa de la península ibérica. Uno de ellos es Fuerteventura, la segunda isla en extensión del archipiélago de Canarias. Miguel de Unamuno, en su destierro, fue el primero que llamó "la guapa" a la isla, enamorado de su calma y su paisaje lunar. 

 

 

Parece ser que el tiempo le ha dado la razón, porque hoy Fuerteventura se ha convertido en un apreciado destino para quienes huyen de la masificación y quieren disfrutar del clima y los paisajes para relajarse, o para activarse con su amplia oferta deportiva al aire libre.

Esta isla canaria es mundialmente conocida por sus playas. Sin embargo, su propuesta para el viajero es mucho más amplia. Al turismo de descanso y de playas, se le unen interesantes propuestas de turismo activo tanto de mar como de montaña, una oferta cultural singular y, por supuesto, la gastronomía local. 

La isla, que geológicamente es una de las más antiguas del archipiélago canario, ofrece cientos de kilómetros de senderos de todo tipo. Caminatas cortas o largas, difíciles y para todos los públicos, su paisaje lunar jalonado de antiguos volcanes es perfecto para disfrutar del senderismo y la soledad.

La ruta GR 131 es su máximo exponente, con 255 kilómetros, recorriendo toda la isla en varias jornadas. Pero hay otras muchas opciones de varias horas o de un día de de duración.

Islas Canarias: un paraíso de playas, nudismo y golf todo el año

En el sur, el verano ya se retira; en el norte, el invierno aún no cede su lugar. Cuando el clima empieza a marcar la agenda de los viajeros surgen entonces esos paraísos de eternas primaveras que seducen por su brisa, por su sol, por su belleza.

Como el pequeño recorrido de Calderón Hondo-Lajares, cerca de El Cotillo y en el que es posible ascender a la punta de un antiguo volcán desde donde los días claros se puede vislumbrar hasta la isla de Lanzarote. O el recorrido de Tindaya-Vallebrón, siempre con la vista del Tindaya de fondo. Este monolito, que los antiguos guanches consideraban mágico, y donde se conservan restos prehistóricos, es sólo accesible con guías oficiales. 

Paseos por tierra y mar

Por su clima benigno, y su amplia oferta, los ciclistas o cicloturistas puede disfrutan a lo grande en Fuerteventura. Prácticamente en todos los pueblos turísticos se ofrece alquiler de bicicletas y mountain-bikes

Conocer el parque natural de las Dunas de Corralejo en bicicleta, con la posibilidad en cualquier momento de parar para tomar un baño en las aguas azules de la zona siempre desiertas de gente, es una posibilidad que pocos destinos del mundo ofrecen sin estar saturados.

Algunas pocas carreteras ofrecen bicisendas, aunque en general el tráfico local es bastante respetuoso con los ciclistas. Las prisas no suelen aplicarse al espíritu isleño, y menos en esta isla de 1650 kilómetros cuadrados y poblada sólo por 115.000 lugareños.

Los alquileres de bicicletas rondan los 12 euros al día o 25 euros por tres días. También se ofrecen bicicletas eléctricas en los principales enclaves turísticos, tanto para disfrutar del cicloturismo como para utilizarse en los desplazamientos a las playas. 

 

 

 

Aunque no sea tanto turismo activo como actividad familiar, varias empresas ofrecen clases de hípica así como recorridos por la isla en caballo, de una hora para los novatos o tres horas para jinetes con nivel.

En algunas localizaciones también es posible realizar excursiones en camellos. Una de estas empresas es Crines al Viento, en la localidad de Antigua Civitatis ofrece probar con quads o motos acuáticas en su amplio catálogo de Fuerteventura.

El Cotillo es uno de los puntos más concurridos en la zona este de la isla para la práctica del surf. El clima suave de Fuertenventura hace que cualquier época del año sea buena para subirse a la tabla. Aunque hay muchas zonas de Fuerteventura para la práctica de esnórquel y buceo, la Isla de Lobos, en frente de la localidad de Corralejo y cerca de Lanzarte, es uno de los destinos más populares. 

 

 

 

 

Historia, cultura y museos

Pero más allá de los atractivos que la geología y la naturaleza ofrecen al viajero, Fuerteventura, también tiene una historia muy interesante que contar.

Aunque durante la dictadura franquista recibió un alivión de desterrados por la dictadura, los primeros europeos llegaron a la isla hace ya más de 650 años, cuando se fundó la localidad de  Betancuria, por los navegantes normandos Bentacurt y Lasalle. La que fuera la capital primitiva de la isla se han convertido hoy en un destino encantador para pasear, comer y cenar en sus restaurantes y  visitar granjas animales donde comprar sus productos típicos, sobre todo el famoso de cabra local, el queso majorero, que se elabora localmente.

Otro destino histórico es la localidad de La Oliva. Ubicada a media hora de la capital Puerto del Rosario y de Corralejos, y a 15 minutos de El Cotillo o de la montaña de Tindaya, se puede visitar aquí la Casa de los Coroneles, una de las construcciones más importantes de la isla.

Y aunque Puerto del Rosario, capital actual de la isla, es quizás el destino menos popular para los visitantes, a su alrededor se pueden conocer algunos interesantes museos. Una opción  interesante para -los pocos- días nublados de Fuerteventura o para conocer la cultura local. 

El Museo de las Salinas del Carmen o el Museo del Queso Majorero, el producto gastronómico más famoso de la isla, son dos opciones, aunque hay más alternativas como la Casa Museo de Unamuno, donde vivió en 1924 el intelectual tras ser desterrado por Primo de Rivera.

 

 

 

 

Gastronomía Km 0

El queso majorero, de cabra, es el producto más exquisito que produce la isla. Curado o tierno, y frito o con miel, es una degustación obligada para el viajero. Algunas granjas, que también tienen venta de producto local, se pueden visitar en algunos puntos de la isla como Betancuria, la antigua capital del país. La isla también produce aceite de oliva, muy escaso y que se puede comprar sólo en sitos muy específicos.

La carne de cabra estofada y el cabrito son los platos típicos. Los restaurantes costeros ofrecen algunos pescados locales como el sargo o la morena. No hay vino en Fuerteventura, pero para algo están los vinos volcánicos de la vecina Lanzarote. Un gastronomía con mucha personalidad para recuperar fuerzas después de  un día de turismo activo.

 
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