El artista y profesor Juan Astica exhibe parte de sus trabajos producidos en la última década en el Paseo de las Artes Duhau. La mención a su faceta pedagógica no es menor. Su técnica de pintura se basa en un procedimiento que requiere preparación y mucha destreza para jugar con los materiales y los tiempos de secado. A la luz de los resultados, domina el método por lo cual puede dar cátedra, como lo hace en la Universidad Nacional de las Artes.

Los óleos de Astica parecen a primera vista similares, pero con solo detenerse un instante frente a ellas emergen las sutilezas. Atender al procedimiento es descubrir las diferencias. El artista trabaja por capas que varían entre las 7 y 13 por trabajo. Cada sesión de pintura dura unos 20 minutos y de ninguna manera puede pintar un cuadro en diferentes días porque, afirma, la “energía es diferente. 

“Para producir un buen caos tenés que ser muy ordenado , sostiene el artista en recorrida junto a Clase Ejecutiva por su muestra.

Astica nació en Santiago de Chile en 1953 aunque vive y trabaja desde hace varias décadas en Buenos aires. Ha recibido, entre otras, el Primer Premio de Pintura del Salón Nacional (2016), Segundo Premio Banco Nación (2015), Segundo Premio Banco Central (2008) y Gran Premio UADE (2006).

El escaso tiempo que pasa ejecutando el cuadro es inversamente proporcional al que se toma para planificarlo. Nada esta puesto allí al azar aunque una primera percepción así nos lo haga creer.

Ese “caos ordenado se crea a base de planificar capas, explorar el uso del pincel a través de diverso arrastres, salpicados y splashings que dotan al cuadro de dinamismo. La experiencia y la docencia le permiten trabajar con las capas aun frescas y concluir el trabajo en menos de una hora.

“La pintura es lo que pasa dentro de ella , apunta y deja así el canal abierto para que el visitante descubra qué es lo que sucede dentro de sus cuadros.

“Pinturas de Juan Astica podrá recorrerse en el Paseo de las Artes Duhau, Av. Alvear 1661, hasta el 16 de diciembre.